bilbao - El veterano actor estadounidense Jerry Lewis falleció ayer a los 91 años en su casa de Las Vegas a causa de una distrofia muscular, según confirmó su agente. A Jerry Lewis se le veía cansado en los últimos meses, acarreaba problemas de salud desde hace tiempo. El actor había tenido fibrosis pulmonar, cáncer de próstata, problemas cardíacos y habían tenido que ponerle un implante en su espalda que le ayudaba a reducir un dolor crónico con el que vivía desde 1965, cuando sufrió un accidente en Las Vegas.

Pero el veterano intérprete aún se encontraba en activo. El año pasado intervino en la película Policías corruptos, en la que encarnaba al padre del protagonista, Nicolas Cage. Y tenía pensado trasladarse a Canadá en breve para participar en el rodaje de una película.

Jerry Lewis nació bajo el nombre de Joseph Levitch en el seno de una familia de inmigrantes rusos-judíos en Nueva Jersey en 1926. Sus padres trabajaban en el mundo del espectáculo y el pequeño Lewis ya cantaba en giras cuando tenía sólo cinco años. Dejó el colegio un año antes de terminar sus estudios, y se dedicó a practicar la interpretación, simulando detrás de los escenarios que hablaba o cantaba moviendo la boca en consonancia.

Lewis fue rechazado por el ejército debido a un problema de corazón y a finales de los años 40 y principios de los 50, formó pareja con Dean Martin, resultando de esta unión uno de los dúos más cómicos de la historia del cine. Coprotagonizaron 16 exitosos títulos en cine, Martin era el galán que hacía suspirar a las mujeres y Lewis, el torpe alelado pero tierno, que gracias a las bromas físicas, género conocido como slapstick, superaba el atractivo físico de su socio. Entre las cintas que rodaron, destacan My Friend Irma (1949), El cantante loco (1951), ¡Qué par de golfantes! (1953), Cómicos en París (1955), Juntos ante el peligro y Loco por Anita (1956), con las que recaudaron varios millones de dólares.

Pero la relación se rompió; no se volvieron a hablar, salvo por apariciones casuales, y siguieron caminos separados. Aunque cuentan que 20 años después fue el propio Frank Sinatra quien volvió a unir a los antiguos amigos. Después de su ruptura con Martin en 1956, Lewis protagonizó y dirigió una serie de películas de éxito como El botones (1960) o El profesor chiflado (1963), película por la que siempre será recordado por el papel del profesor de química Julius Kelp.

Más tarde, llegarían Un chalado en órbita (1966), de Gordon Douglas, y sus propias cintas El terror de las chicas (1961), Jerry calamidad (1964), Tres en un sofá (1966) o ¿Dónde está el frente? (1970).

A comienzos de los setenta estuvo más centrado en la televisión, con actuaciones en directo y presentaciones de festivales benéficos. Fue a mediados de esa década cuando llegó su declive artístico.

En los años 70 su figura perdió atractivo para el público e inteligentemente se retiró durante un largo tiempo del cine, dedicándose a la escritura, la televisión y al teatro. No obstante, todavía participaría en algunos títulos memorables como El rey de la comedia (1983), uno de los hitos en la carrera de Martin Scorsese; Arizona Dream (1993), Emir Kusturica, una de las películas imprescindibles del indie con Johnny Depp; o Miss naufragio (2004), de Bryan Michael Stoller. En total, protagonizó medio centenar de películas.

Uno de sus últimos trabajos, Max Rose dirigida por Daniel Noah fue llevada al Festival de Cannes en 2013 y en 2016, intervino en Policías corruptos, en la que encarnaba al padre del protagonista, Nicolas Cage.

labores humanitarias Al margen de su profesión, Jerry Lewis fue dueño de una pequeña cadena de cines y con frecuencia se involucró en labores solidarias, especialmente con la Asociación de Distrofia Muscular estadounidense que presidió durante décadas, hasta mayo de 2011, y para la que logró reunir unos mil millones de dólares. Fue nominado al Premio Nobel de la Paz en 1977.

Entre las condecoraciones recibidas están la Legión de Honor Francesa (1984), el León de Oro a su carrera de la Mostra de Venecia (1999), el título de Comendador de la Legión de Honor de Francia (2006) y el Premio Humanitario Hersholt de la Academia de Cine de Hollywood, que le fue entregado en la 81 gala de los Oscar (2009). Nunca conseguiría la estatuilla dorada por sus interpretaciones.

El actor se casó dos veces. La primera con la cantante Patty Palmer (1944-1980), con quien tuvo cinco hijos (Gary, Ron, Scott, Chris y Anthony), y en 1983 con una bailarina de Las Vegas llamada Sandee Pitnick, con la que tuvo a su hija Danielle (1992).

El pasado mes de junio sufrió una infección urinaria y fue ingresado en un hospital de Las Vegas, donde se sometió a un tratamiento antibiótico. Una complicación que en esta ocasión, no pudo superar. “Es reír o llorar. Las risas son lo nuestro. La gente no puede odiar cuando se está riendo”, escribió el actor en su libro The Total Filmmaker, un tratado de pasión sobre el arte del cine y el humor desde la perspectiva de quien dedicó toda su vida a hacer sonreír al público.