gernika-lumo. Ayer se cumplió el trigésimo aniversario del traslado del célebre cuadro Guernica desde el Museo MOMA de Nueva York a Madrid y, al igual que entonces, la reivindicación para que la obra pintada por Pablo Picasso repose en Gernika-Lumo sigue vigente debido a que las autoridades españolas no acceden a ello.

Treinta años después de que la obra del artista malagueño llegara a Madrid, el Consistorio vizcaino realizó un acto para solicitar, una vez más, el derecho de su pueblo a cobijarlo como "reconocimiento del sufrimiento de sus víctimas". Además de enarbolar los habituales contra-argumentos para refutar las opiniones técnicas que desaconsejan el traslado, las autoridades locales reclamaron "a la Diputación Foral de Bizkaia, Gobierno Vasco y Gobierno Central, el inicio de los trámites para el traslado definitivo del cuadro Guernica a Gernika.

Tomó la palabra en el acto uno de los supervivientes de aquella masacre que inspiró a Picasso, Luis Iriondo, que recordó que, aunque se argumenta que la voluntad del pintor malagueño era que "cuando volviera la república el cuadro volviera al Museo del Prado; la república no ha vuelto y el cuadro no está en el Prado sino, curiosamente, en un museo con nombre de reina".

Una de las personas que más han luchado en el objetivo del traslado del cuadro, el senador jeltzale Iñaki Anasagasti, opinó que "técnicamente se puede", antes de asegurar que "la mayoría de los informes están comprados". Anasagasti añadió que "si se hace un transplante de corazón, el hombre llega a la luna o se cambia la Constitución en una semana, que utilicen otra argumentación".

El senador recordó que el Grupo Vasco en el Congreso realiza con asiduidad esta reivindicación, la última hace dos meses "que fue tumbada por el Senado". Pero aseguró que seguirían insistiendo. "Si pintamos algo en Madrid, tras el 20-N una de nuestras reivindicaciones será que el cuadro venga a Euskadi con motivo del 75 aniversario del bombardeo. Creo que llegará el tiempo en el que, por lo menos temporalmente, el Guernica vendrá aquí", aventuró.

El alcalde, José María Gorroño, aseguró no entender "cómo el gobierno de Madrid, en manos del PP o del PSOE, no tenga la voluntad política de reconocimiento hacia las victimas de Gernika". Al acto asistieron antiguos alcaldes de la villa, como Juan Luis Zuzaeta o Eduardo Vallejo, quien fuera hace tres décadas diputado en Madrid "siendo ministro Iñigo Cavero. Al día siguiente de llegar el cuadro se lo estábamos pidiendo", recordó. Con él de alcalde y Luis Ortuzar como edil de cultura, se colocó en Gernika una reproducción del cuadro como el famoso lema 'Guernica Gernikara' "para mantener la llama de la reivindicación", recordó Ortuzar. "Dejamos el texto de tal manera que fuera sencillo quitarlo cuando llegara el cuadro", aseguró.