Así puedes vigilar tu casa a distancia con domótica si te vas de vacacionesFreepik
Llega el verano, época de vacaciones y dejas tu casa por unos días para disfrutar de un merecido descanso y desconectar de la rutina. Has dado llaves a la vecina y orden de que, por favor, te recoja el correo del buzón, riegue las plantas y que de vez en cuando suba y baje las persianas para que parezca que vive alguien. Pero, aún así, ¿te da miedo irte de vacaciones por si algún desconocido entra sin permiso? Entonces es hora de aliarte con la domótica y los gadgets más novedosos del mercado.
Domótica hogar
Puedes domotizar tu casa tú mismo con videoporteros inteligentes, cámaras de videovigilancia, persianas motorizadas... La primera solución, unida a una cerradura inteligente, te sirve para saber quién llama y decidir si abres o no. Puede que sea un repartidor con un paquete que esperas y abras la puerta para que lo deje en la entrada, por ejemplo.
Un videoportero inteligente.
Por otro lado, ya no hace falta que dejes las persianas medio bajadas o le digas a la vecina que las suba y las baje. Ahora tienes la opción de control remoto con la app en el móvil si antes has instalado un motor en cualquiera de ellas. Lo mismo puedes hacer con estores y toldos.
En cuanto a la iluminación, está demostrado que, si hay luz, se cometen menos delitos por lo que una buena opción es colocar un detector de movimiento para que las bombillas se enciendan al notar una presencia, tanto en interior como en exterior. Incluso sensores crepusculares para mantener las lámparas de fuera encendidas durante la noche. Y, si prefieres tener tú el control, apuesta por un relé wifi (dispositivo que permite activar o desactivar un circuito eléctrico a través de una conexión inalámbrica a Internet) y las bombillas y enchufes inteligentes.
Domotizar un hogar
Antes de convertir en inteligente tu casa, debes tener en cuenta tus necesidades y qué quieres controlar mediante aplicaciones. Una vez hecha esta tarea, hay que elegir entre un sistema domótico centralizado o descentralizado. En el primer caso, se agrupan todos los dispositivos en una plataforma y normalmente, requiere una instalación por parte de un profesional. Si, por el contrario, prefieres controlar cada elemento por separado o en pequeños grupos, opta por el sistema descentralizado. Serán más fáciles de manejar mediante asistentes como Alexa, Siri o Google Assistant.
Si dispones del asistente de voz Alexa, te avisará si alguien se encuentra en tu casa sin invitación. ¿Cómo? Deberás activar la función de ultrasonidos (que son ondas sonoras que el oído humano no puede percibir). Al emitirlos, el sistema almacena los ecos que producen mediante sus micrófonos y, si detecta que algo o alguien está bloqueando esas ondas, lo notificará. Para activar esta función, abre la aplicación Alexa y toca el botón Más en la esquina inferior derecha de la pantalla. Después, en Dispositivos y selecciona el que quieres utilizar para la detección de movimiento. A continuación, pulsa la opción de Detectar movimiento y Enviar notificaciones cuando se detecte movimiento.
En ese mismo menú de Configuración, se encuentra la función Alexa Guard, que te avisa si escucha ruidos sospechosos, detecta humo o te has dejado la puerta del frigorífico abierta, por ejemplo. Para activarla cuando te vayas de casa debes decirle Alexa, me voy y cuando regreses, Alexa, estoy en casa.
Modelo de cámara de vigilancia nocturna.
Cámaras de vigilancia
Como ves, existen varias opciones para engañar a posibles ladrones que quieran entrar en tu hogar. Pero si quieres saber realmente lo que pasa dentro y fuera en tiempo real, puedes instalar cámaras de vigilancia. Es posible colocar tantas como quieras y todas conectadas a tu smartphone.
Algunas de ellas disponen de función de comunicación bidireccional con altavoz y micrófono para que puedas escuchar y hablar con quien se encuentra en la casa. También es posible adquirir modelos con detección de movimiento con rotación vertical y horizontal para abarcar un área extensa de vigilancia. E, incluso, puedes instalar cámaras con visión nocturna que apenas necesitan iluminación para captar imágenes, que además, luego se quedan almacenadas en tarjetas de memoria o en la nube.