Ya está en circulación en España una nueva moneda de 1,5 euros. El número máximo de estas piezas que se acuñe será de 12.000, con lo que desde el primer momento se va a convertir en un objeto de deseo para los coleccionistas y será raro, por no decir imposible, que alguien pague con esta moneda. Si te pagan con una no la rechaces; merece la pena.
Y no es que sea raro solo por el hecho de haber tan pocas unidades, sino por su valor real. Es una moneda de inversión (bullion) fabricada en oro español, con el peso de una onza troy (algo más de 31 gramos) y una pureza de 999,9 milésimas.
Eso multiplica por más de 1.000 su valor, y se podrá comprar por unos 1.750 euros. El precio no es invariable porque se fija a partir de la cotización diaria del oro en el mercado mayorista. A ese precio hay que incrementarle un 10% más ya que estas monedas estarán exentas de tributación sobre el impuesto del valor añadido (IVA).
La otra curiosidad de la moneda es que el anverso no incluye al rey Felipe como sí hacen las monedas de 1 y 2 euros (al margen de las ediciones limitadas de 2 euros que se emiten con frecuencia), sino que su rostro es sustituido por el de un lince ibérico. En el reverso, junto al nombre del rey, aparece un columnario.
¿Qué son las monedas 'bullion'?
Las monedas bullion (que hace referencia a lingote) o de inversión son monedas no destinadas a su uso habitual sino que están pensadas para coleccionarlas y que con el paso de los años se revaloricen. Llegan ahora a España, a través de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, que pretende acuñar más en los próximos años, después de haber triunfado en países como Estados Unidos, Australia o Sudáfrica.
