S protección y no mordaza; una pared blanca y libre para los grafitisy no el muro electrificado de una prisión de alta seguridad. Así ven las mascarillas nuestras de cada día desde la agrupación Bilbao Centro que preside Ángel Lorente , con la inestimable ayuda del gerente Jorge Aio y la directora artística Olga Zulueta. Entre ellos nació la idea de organizar la primera presentación de mascarillas con mensaje que ayer despegó en Basuki, un espacio de gastronomía social en el que se combinan la buena cocina, con magníficos caldos y una excelente coctelería, con el arte, la música y la cultura, procedente de los viñedos del Grupo Bilbao Berria, con Rafael Viar e Iñaki Lasa a la cabeza.

Mientras la diputada de Cultura, Lorea Bilbao, se despedía en la puerta del pequeño Jon Iriondo en su silla de paseo, Paloma Siqueiros, anfitriona de Basuki, ultimaba los detalles junto al trío bilbocentrista. La media luz sugerente y los cócteles sugestivos, el espacio y sus distancias, la sonrisa de bienvenida y los agradecimientos. Todo estaba presto para que la tarde se lanzase a la aventura de un desfile de gritos de libertad con la boca tapada. En plena recta de Juan de Ajuriaguerra todo fluía bajo la máxima del buen humor. Tanto, que a su llegada Lorea posó junto a Maider Viteri, la propia Olga Zulueta y Janire Matilla en lo que bien pudiera considerarse un cuadro de danza o un número de musical. ¡Ay, el buen humor que tanta falta nos nace!

Entremos en harina. En defensa del arte y la cultura la propia Lorea mostró una mascarilla hecha a mano y estampada en azul con la baldosa de Bilbao como telón de fondo, obra de Lourdes Fernández, Lulúsemuá. La presidenta de Bilbao Basket, Isabel Iturbe, homenajeó a los hombres de negro. Janire Matilla, de la peña Indautxu, fundada en 1995, honró el Athletic de nuestros amores (y de nuestros pesares en los últimos tiempos...) con la boca tapada y Aitor González, en nombre de la Federación Vizcaina de Deporte Adaptado lució en su mascarilla un original hombre de Vitruvio, legendaria obra de Leonardo da Vinci. Igor Vega y Maider Viteri mostraron el tapabocas que defendía los valores de Arkote Arraun Taldea y Oskar Seoane mostró una bien distinta, en defensa de la Fundación Síndrome de Down. Una mascarilla solidaria. A estas alturas el desfile ya se celebraba como una hermosa historia.

Fue la primera edición pero no será la última, seguro. A la mascarilla, vista la realidad de la pandemia, se le antoja la misma larga vida que al rey (la reina, en estos tiempos...) de Inglaterra. Llega ahora a la crónica una mascarilla sentimental. Nagore Aio desfiló con una mascarilla reivindicativa de Maialen Aulestia, el único caso del Síndrome de Donohue en toda Europa. De nuevo la solidaridad, virtud que volvió a brillar en el rostro de Rafael Ledesma, presidente del Consejo Territorial de la ONCE en Euskadi.

En los campos de la reivindicación -para no callar, vamos...- aparecieron el actor Kepa Gallego con su defensa del movimiento Black Lives Matter que lleva camino de expandirse por medio mundo desde Estados Unidos (Alberto Ibáñez empujó en la tarea...) y Elisabeth Ormaza, defensora, desde su rostro pero con el cuerpo entero, del Women Power. Como broche, el propio Adolfo Lorente desfiló con una mascarilla de Bilbao Centro.

Testigos de todo cuanto les cuento fueron el dramaturgo Ozkar Galán, Amaia Zarate, el fotógrafo Txema Maura, Javier Ríos, Nora Alonso y un puñadito más de amigos -pandemia obliga en asunto de aforos...- que disfrutaron de lo lindo. En la atmósfera flotaba el perfume de los sentimientos defendidos en una idea que tiene vocación de continuidad. Visto lo visto ayer, no parece que habrá problemas para una segunda edición de un encuentro así, de buena y comprometida gente que se rinde jamás.

Bilbao Centro escoge Basuki, un espacio de gastronomía social, para la primera presentación de mascarillas con mensaje

Personalidades de Bilbao presentan y desfilan con mascarillas reivindicativas en una tarde cargada de lemas sugerentes