HABÍA revuelo de mandiles azules y makilas de madera de níspero y empuñadura de metal plateado ayer en el Ein Prosit de la plaza del Ensanche. Y, en medio de todo, sudaba Jon Mujika. “Estoy muy agradecido, pero no llevo bien esto de que me den premios”, confesaba el reconocido periodista. Él prefiere contar cómo reciben premios los demás. Pero, cuando el trabajo se lleva a cabo con maestría y buen hacer, el riesgo de que te caiga un galardón siempre existe. Y en eso estaba Mujika.

La Cofradía de la Makila le hizo entrega de la segunda edición de su Premio José Luis Iturrieta a la mejor labor periodística gastronómica.

Luis Ángel Castresana, fundador de la cofradía, expuso que Jon Mujika lo merecía “por su larga trayectoria profesional y su bilbainía” y evocó al galardonado del pasado año, Ramón Bustamante.

Antes, había glosado la figura de José Luis Iturrieta. Enrique Thate, el más bilbaino en Alemania y el más alemán en Bilbao, resumió la figura del homenajeado con un: “Escribe mucho y escribe bien”.

Ainhoa y Aitor Iturrieta, hijos de José Luis, hicieron entrega al periodista de DEIA de la pedarra acreditativa. Se trata de una pieza barro con esmaltado blanco en la mitad superior, típica de la artesanía tradicional vizcaina; una cántara con asa, tapa y pitorro que las mujeres portaban sobre la cabeza. “Lo usaban para transportar agua”, aclaró Castresana. “Poca agua le voy a poner yo”, respondió jovial un Mujika que destacó que era un honor recibir el galardón y que alabó la figura de Iturrieta. “No seguí su camino en el periodismo gastronómico porque eso es sencillamente imposible”, afirmó destacando la talla del también escritor.

Lo observaba todo el gran futbolista y mito del Athletic de Bilbao, Miguel Jones. Sí, el club de San Mamés posee el don de elevar a leyenda también a quienes no vistieron su camiseta.

Como es de rigor, el presidente de la cofradía, Pedro Prieto, impuso el mandil institucional a Mujika. Tomaron parte en el acontecimiento los cofrades Javier Mestraitúa, Javier Martín, Patxi Rentería, Miguel Ángel García Diego, Joseba Batiz, Juan Ángel Ortiz, de Laudio, Iñaki Astoreka, Mari Mar Alonso y Borja Irizar. El cofundador Kepa Freire, enciclopedia culinaria andante, lucía, makila en mano, txapela azul y unos rompedores tirantes.

Asistieron nietos de José Luis Iturieta, como Unai, Maddi y Manex , con su ama, Leire Asporosa. Y primos del recordado periodista: Pedro Peña, Joseba Bilbao y José Luis Berrio. No se perdió el evento Jose Mari Amantes, de Moskotarrak, quien fue con Asun Muñoz. Entre las numerosas personas presentes, Beatriz Marcos o María Loizaga.

Tras los aplausos, irrumpió Thate con sus platos preñados de fiambre y sus jarras de cerveza. Aconteció esto envuelto en ese calor que solo invade el Botxo esos días de verano en que brillan las nubes.