OS vecinos del barrio de Saldarian, situado a tres kilómetros del casco urbano de Ugao-Miraballes, pero perteneciente a la localidad de Zeberio, han iniciado una campaña de recogida de fondos para el arreglo de la ermita de San Pedro y San Blas “que se encuentra herida de muerte y requiere de una actuación urgente para que no se caiga ya que el riesgo de colapso, si hace un invierno crudo o ante vientos fuertes, es muy factible”, explican Lorea y Susana.

Hace un año, ya se activó una iniciativa similar para poder, al menos, poder retejar la cubierta y frenar así su deterioro. En esa ocasión, la vecindad organizó un intenso programa de actividades en torno a la festividad de San Blas que incluyó una conferencia a cardo de la asociación BEL -Bizkaiko Ermiten Lagunak-, misas con la correspondiente bendición de cordones y alimentos, lunch y ambientación musical. Los asistentes pudieron, en esa ocasión, depositar sus aportaciones en el bote colocado en la entrada del templo.

Sin embargo, desde entonces, los daños en el querido edificio religioso se han acrecentado notablemente a raíz de la caída, a finales del pasado invierno, de parte del muro de su pared trasera. Uno de los posibles motivos de este desprendimiento ha podido ser el agua de la lluvia que se ha ido filtrando desde el alero del tejado hasta la parte final del muro “deshaciendo poco a poco la argamasa”, indican. Además, es más que posible que los enganches de las líneas de Iberdrola y telefonía instalados en la parte superior de la pared hayan ejercido demasiada presión a un muro ya de por sí debilitado.

El proyecto que evitaría que el desplome de la pared siga avanzando hasta hacer colapsar parte del templo pasa por una importante inversión que requiere la colocación de andamios, el apuntalamiento de la cubierta, la retirada de las piedras del muro trasero para su limpieza y posterior recolocación, así como trabajos de cantería y albañilería para dejar la zona afectada en perfecto estado de estabilidad y de seguridad.

Rifa y recaudación

Uno de los ejes de la campaña es la venta de boletos para la rifa de tres premios: un fin de semana en los apartamentos turísticos de Zeberio, un cuadro con la imagen de la ermita de San Pedro y San Blas y un sencillo lote de productos compuesto por un jamón y un queso. El precio del boleto es de 1 euro y se pueden adquirir en Udarriaga Estankoa, la Parafarmacia y en las clínicas dentales de Urresola y Julián. “Somos conscientes de que con esta iniciativa no se va a obtener más de un 15% del dinero necesario para las obras, pero pensamos que puede dar visibilidad y socializar el problema”, declaran Lorea y Susana. El sorteo del que saldrán los números agraciados tendrá lugar en el pórtico de la ermita de Saldarian, a las 12.00 horas del próximo 31 de enero.

De manera paralela, el vecindario ha habilitado el número de cuenta ES32 2100 4287 02 2100101042 en La Caixa para que cualquier persona “pueda realizar aportaciones y donaciones que nos ayuden a recaudar los fondos que requiere la restauración del muro posterior”. Toda ayuda será bienvenida y muy agradecida por parte de este núcleo poblacional de Zeberio, de unos 60 residentes, que tiene en la ermita de San Blas y San Pedro su principal elemento patrimonial.

Se trata de un templo sencillo, con la doble cubierta de madera interior como aspecto más interesante y singular y que alberga las imágenes de sus protectores, San Pedro y San Blas, además de dos pequeñas Andra Maris. Por su cercanía a Ugao-Miraballes, depende eclesiásticamente de la parroquia de San Bartolomé, y no destaca por sus alardes arquitectónicos, pero es bonito y bucólico y de gran valor sentimental para el barrio de Saldarian y también para los ugaotarras. Y es que, muchos de los inmigrantes que con la industrialización de la década de los 60 del siglo pasado encontraron trabajo en las empresas de la villa se asentaron en este bello enclave rural, sobre todo malacitanos.

Auzolan en 2004

Es tal la devoción y el cariño por este templo, que ya en 2004, y ante su cada vez mayor estado de deterioro, una veintena de vecinos de Saldarian organizaron un Auzolan para recuperar la estructura y cubierta del pórtico ya que se encontraban en muy mal estado de conservación, ruinoso y peligroso. Esa iniciativa contó con la colaboración del párroco de entonces, don Joseba, el Obispado de Bilbao proporcionó parte de la financiación y los vecinos aportaron, sobre todo, su tiempo, esfuerzo y dedicación.

Esa iniciativa contó, además, con dos importantes donaciones: las tejas por el Ayuntamiento de Zeberio y parte de las maderas por la empresa Orue de la localidad. Además de reparar el muro y la cubierta del pórtico, también se aprovechó para construir una sencilla acera alrededor de la ermita para evitar la crecida de zarzas y se eliminó la raíz de hiedra que estaba penetrando y dañando el muro lateral que está junto al altar.

El derrumbe de parte de la pared posterior puede provocar daños irreparables y es urgente abordar las obras de reconstrucción

La campaña organizada por los vecinos del barrio se centra en una rifa y en las donaciones a través de un número de cuenta