Arrigorriaga - Un sencillo itinerario urbano por el centro de Arrigorriaga permite a vecinos y visitantes adentrarse en el origen de la localidad y en los hechos más relevantes de su historia. Ocho paradas conforman la Ruta de las Piedras Rojas, un viaje a su pasado diseñado hace una década y que de nuevo DEIA recorre junto al escritor Jose Luis Urrutia, responsable de la parte creativa de aquel proyecto.

¿Qué es lo que le enganchó de la iniciativa?

-Yo trabajaba entonces como guionista para la productora Lautso, de Bilbao, y cuando se me presentó el proyecto pensé que suponía un gran reto. Y eso fue lo que más me enganchó. Había que crear algo para atraer visitantes a una localidad que no destacaba por su monumentalidad arquitectónica, ni por sus avatares históricos ni por relevantes acontecimientos acaecidos en su territorio, pero que tenía su propia historia.

Hablemos de la ruta. El eje central sobre el que gira es la mítica Batalla de Padura. ¿Cuándo ocurrió?

-Históricamente, al menos en las dimensiones que se cuenta, no existió. Se pudo dar un encuentro entre soldados del reino asturleonés y lugareños de esta zona de Bizkaia, una escaramuza que hizo huir al enemigo tras causarle algunas bajas, quizá más de las habituales. Aconteció en torno al año 888 y luego, la tradición oral engrandeció esa victoria hasta convertirla en el fabuloso relato que hoy conocemos. Por eso, la mítica batalla de Padura es, en realidad, un mito pero no en sentido peyorativo, sino con toda la belleza, épica y emoción de las leyendas.

¿Es cierto que de ahí procede el nombre de Arrigorriaga?

-Eso se dice popularmente. La leyenda cuenta que en la batalla, celebrada a orillas del río Nervión, se derramó tanta sangre que las piedras del río quedaron teñidas de rojo. Ante esa visión alguien pronunció la palabra Arrigorriaga, que en castellano viene a significar piedra roja, bautizando para siempre el lugar hasta ese momento conocido como Padura. Sin embargo, todo parece indicar que la referencia a las piedras y a su color rojo proviene de los riquísimos yacimientos de hierro que se extienden desde Arrigorriaga hasta Cantabria y que confieren a la tierra ese color característico.

El itinerario establece ocho paradas por el pueblo. ¿Cuáles son?

-Por orden: plaza del ayuntamiento porque es un punto céntrico donde está el organismo público más importante, iglesia de Santa María Magdalena, pérgola del parque, anfiteatro del parque, puente Moyordin, parque Barua junto a la kultur etxea y bajo los árboles y frontón.

¿Qué historia esconden la iglesia y la pérgola?

-La iglesia de Santa María Magdalena alberga en su soportal el célebre sepulcro de piedra en el que la tradición hace descansar los restos mortales del príncipe Ordoño, fallecido en el transcurso de la mítica batalla, aunque luego el rigor histórico desmonta el mito, pues el sepulcro data de los siglos XIV-XV, es decir, muy alejados de aquel siglo IX. En cuanto a la pérgola del parque, se eligió como punto para hablar de la batalla en sí, pues la misma se dio en ese paraje llano, cercano al Nervión.

Seguimos paseando y llegamos al anfiteatro del parque.

-Elegimos ese lugar para recordar la historia de las Juntas Generales de Bizkaia y el orden en el que eran nombrados los municipios que conformaban el Señorío en las reuniones junto al Árbol de Gernika. Quedó establecido de manera fija en 1854, y Arrigorriaga ocupaba el puesto 39, correspondiendo el 1º a Bilbao y el último, el 115, a Basauri.

Del puente Moyordin, ¿qué tenemos que saber?

-Que Arrigorriaga es un cuello de botella, un punto estratégico en el que el valle del Nervión se estrecha antes de abrirse a la cuenca del Ibaizabal. Quien controlaba el puente tenía la llave de la ruta que unía a Bilbao con Castilla y, de hecho, fue escenario de una violenta batalla el 7 de mayo de 1872, durante las primeras escaramuzas de la última Guerra Carlista.

Y, los tres paradas en el parque Barua, ¿qué representan?

-El esfuerzo de aquellas gentes, de aquellos antepasados nuestros que llegaron a Arrigorriaga durante la industrialización o que emigraron a América desde el siglo XVI.

Escritor y guionista que diseñó la ruta de las piedras rojas de Arrigorriaga