Igor García, miembro del equipo Sopuerta Bizikleta Taldea culminó en tres horas, cinco minutos y 52 segundos el novedoso circuito XL, de sesenta kilómetros de distancia, diseñado por los organizadores de la octava edición de la marcha MTB Pedales de Hierro de Trapagaran. Él fue uno de los 333 ciclistas -dos de ellas mujeres- que se inscribieron en esta marcha de montaña no competitiva organizada por el Ayuntamiento de Trapagaran con el apoyo del club local Katalino, Alirón Parkea y la empresa Aire Norte que permite hacer deporte y conocer algunos de los paisajes más espectaculares de Meatzaldea.

"Es la primera vez que participaba porque otros años que lo intenté se habían agotado las inscripciones", reseñaba Igor, quien destacó que el circuito "se ha hecho duro porque hay una importante subida de unos diez kilómetros hasta el Argalario y, sobre todo, porque en la parte final había mucho barro, aunque no en todo el recorrido, sino concentrado en algunas zonas". Luego "es cierto que había sendas que estaban muy bien y estaba muy bonito", así que "ha sido una pena por la niebla que no ha permitido disfrutar mucho de las vistas, pero el entorno es espectacular y el día con esta temperatura estaba invitaba correr", valoró este corredor que acudió a la prueba acompañado de su mujer e hijas.

No fue el mejor crono logrado por Igor García en esta novedosa distancia de Pedales de Hierro la única gesta que materializó ayer domingo el club soportano en los montes de Triano. Su compañero de equipo, Pedro Castaños, fue el primero en cruzar la meta de la calle Juan Sebastián Elcano tras completar el recorrido de la marcha corta de 35 kilómetros con un tiempo de 1 hora 35 minutos. "Esta es la cuarta vez que participo y, aunque este año ha cambiado el recorrido, como lo hice este pasado lunes ya sabía cómo iba". De hecho, "tenía pensado haber cubierto la marcha larga, pero ya vi que había un fangal bueno". A diferencia de otros años el circuito ha resultado "un poco menos técnico y entonces se va un poco más rápido porque, pese a que había barro, las pistas estaban muy limpias y no hubo tanto peligro por la buena labor de limpieza que ha hecho la organización", resumía Castaños.

Como Pedro e Igor, otros ocho corredores del club encartado se animaron a participar en esta auténtica fiesta de la bicicleta que reunió en total a 730 dorsales entre los corredores y corredoras inscritos -de los cuales doce eran mujeres- y las invitaciones entregadas a los sponsors y empresas colaboradoras, como DEIA.

Lista de espera

"Sin duda es de subrayar la fidelidad de las inscripciones ya que ha subido muy pocas bajas que se han cubierto rápidamente con los reservas y aún así se han quedado 125 personas en lista de espera", informó el concejal de Deportes y Turismo de Trapagaran, Carlos Marquina, quien manifestó su agradecimiento a todos los participantes que "con su presencia reafirman el compromiso municipal por el deporte saludable y por la organización de eventos deportivos como Pedales de Hierro que, además, son un elemento tractor: los participantes son futuros visitantes que quieran conocer mejor nuestro municipio, su historia, sus paisajes o su oferta gastronómica".

Es el caso de los riojanos Jesús Fernández y Óscar Cobos, que no dudaron en acercarse desde un pueblo cercano a Logroño para sumarse a esta marcha, referente para los amantes del ciclismo de montaña de la península y que señalaban su intención de repetir. "El recorrido es algo diferente a la que corremos allí, más pista pero las sendas de bajada eran muy chulas y el ambiente estaba muy bien" resaltó Jesús, mientras que Óscar hacía hincapié en las cuestas: "Duras pero muy bonitas entre árboles en la niebla que le daban un tono mágico".

Como viene siendo habitual en todas las ediciones de Pedales de Hierro, la organización diseñó un programa de actividades para grandes y pequeños. Se trabajaron conceptos como la seguridad vial, las habilidades sobre la bici en una propuesta de variadas y didácticas acciones. De esta manera, el aparcamiento del polideportivo municipal de Trapagaran acogió un taller de educación vial, otro de lectura y otro de pintura -los dos últimos, organizados por la Fundación Síndrome de Down-. Asimismo, todos aquellos que se acercaron pudieron participar en una yincana de habilidades y disfrutar de un córner de hinchables.

La jornada

Fiesta. Pedales de Hierro nació para combinar un deporte saludable como el ciclismo de montaña con la promoción turística de Trapagaran mediante la colaboración a nivel de clubs, entidades e institucional.

Recorrido. El Club Katalino BTT apostó por un nuevo trazado de sesenta kilómetros y 1.915 metros de desnivel positivo. La propuesta intermedia tenía 52 kilómetros y 1.600 metros de desnivel y, la más corta, 32 kilóemtros y 1.000 metros de desnivel.

Participantes

730

La marcha Pedales de Hierro ha logrado convertirse en un referente para los aficionados al ciclismo de montaña de Euskadi. En esta edición tomaron la salida 730 corredores y corredoras procedentes en su gran mayoría de Euskalherria -incluidos 4 de Iparralde- pero con la participación de aficionados llegados de Cantabria, Castilla León, Extremadura o La Rioja y Aragón.