- Entrenamientos en la playa, en grupos reducidos, sin poder tocar el balón, con pocos efectivos, sin pisar la cancha durante varios meses y sin el apoyo del público en las gradas. Así se resume la compleja temporada que han experimentado los equipos que conforman la sección femenina del Ugesaski, club de baloncesto integrado dentro la Sociedad Deportiva Ugeraga de Sopela.

De entre todos ellos ha destacado el senior B, Talleres Artolozaga Ugesaski Sopela Turismo, que se ha proclamado campeón de Bizkaia de Primera categoría, imponiéndose en la Final Four por primera vez en los 39 años de historia del baloncesto en Sopela. "Muchos años los diferentes equipos del club han quedado campeones en la Liga regular, pero luego han perdido en la Final Four. Haber logrado romper esa barrera es todo un orgullo", señala el técnico del equipo, Ekaitz Añón, que lleva en la estructura de la entidad sopeloztarra desde 1998.

En este sentido, la que acaba de concluir es, sin duda, "la temporada más dura" que han vivido como consecuencia de la pandemia, que les ha llevado a realizar una decidida apuesta por seguir entrenando de la manera que Sanidad lo permitiese. "Ha resultado muy complicado mantener la ilusión de todas", subraya. Una lucha contra todo tipo de elementos adversos que no les han llevado a arrojar la toalla en ningún momento. "Me vienen a la mente los entrenamientos en la playa o en el campo de hierba de Fadura sin poder tocar balón para juntarnos todas por lo de los pueblos colindantes. También esos complicaos meses de invierno en los que, mientras otras personas aprovechaban para ir a bares hasta las ocho de la tarde, las jugadoras perdían el poco tiempo disponible para estar con amigas yendo a realizar entrenamientos físicos", valora.

Un dulce final que ha premiado el sacrificio de toda una campaña muy complicada debido a las situaciones personales originadas por el covid-19. "Debimos cambiar a Leire Arri, Ainhoa y María, pero tuvimos la suerte de encontrar a Delmo e Izaro para poder acudir diez a los partidos, además de la ayuda de Sare y Gallego, así como de Enara, Marta, Lucía, Mintegi o Leire, puntualmente, para poder entrenar al menos un día a la semana cuestiones tácticas", rememora el técnico sopeloztarra.

Así, llegó marzo y este grupo de recién ascendidas empezó a ganar todos los partidos, encajando solo una derrota. "En las ultimas jornadas y en las semifinales y la final nos ayudaron Garazi, Ione, Nadia y Elene en la cancha, y Jorge y Jon Ander en los banquillos; convirtiéndonos en el mejor equipo de Bizkaia de esta temporada, en el que nadie nos ha regalado nada", ensalza. "Son campeonas de Bizkaia y un espejo en el que deberían mirase las jugadores jóvenes del club", añade. No obstante, más allá del senior B, otros otros equipos del Ugesaski han cosechado buenos resultados, como es el caso del senior A, que se ha proclamado subcampéon de Bizkaia, al igual que el Junior femenino y el cadete. "A nivel deportivo ha sido una temporada muy buena", comenta Ekaitz.

Además de los éxitos colectivos, a nivel individual destaca la convocatoria de Garoa Sobrino, jugadora infantil de 13 años, que ha sido seleccionada por Bizkaia para competir en los campeonatos de Euskadi. "Al final, el trabajo que lleva haciendo durante años se ve recompensado, precisamente esta temporada en la que no han podido competir por el tema sanitario", indica Ekaitz sobre esta canterana del Ugesaski desde su eskola en Zipiriñe. Mención especial merece también la sopeloztarra Ione Andersen, afincada en Sopela con padre de origen danés, que ha sido convocada por Dinamarca como preparación del campeonato nórdico. "Preparamos un dossier con sus actuaciones y no dudaron en llamarla. Ione está encantada de vivir esta experiencia", sostiene Ekaitz, que se muestra ilusionado con los próximos retos. "Somos un club puntero en el baloncesto femenino en Bizkaia y ha coincidido que tenemos buenas generaciones de jugadoras que ahora ven alicientes deportivos en el Ugesaski", expone. Una cantera trabajada desde la cuna, el colegio Zipiriñe y la ikastola Ander Deuna, junto con la Ampa del colegio de Gorliz, que les ha convertido en la punta de lanza del baloncesto vizcaino.

"Me vienen a la mente los entrenos en la playa o en el campo de hierba de Fadura sin poder tocar balón"

"Son campeonas de Bizkaia y un espejo en el que deberían mirase las jugadoras jóvenes del club"

"Haber logrado romper la barrera de la Final Four es todo un orgullo"

Entrenador del Ugesaski