El ascensor de Solokoetxe dejará de prestar servicio el próximo lunes. Así lo ha notificado la empresa concesionaria del servicio al Gobierno vasco, alegando el déficit económico que supone la explotación del mismo. Bilbobus va a establecer desde ese mismo día una lanzadera que cubrirá el trayecto del elevador de forma temporal.

El histórico ascensor, de pago y gestionado por una empresa privada, salva el desnivel entre la calle Iturribide y Solokoetxe.

Según han informado fuentes del departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, la empresa que gestiona el ascensor ha presentado un escrito en el que solicitan la rescisión de la concesión. Alega para ello un “déficit económico” de la explotación, lo que les impediría seguir prestando el servicio.

Desde el departamento que dirige Iñaki Arriola han solicitado a la empresa que les haga llegar los datos económicos que sostendrían esas afirmaciones. Una vez que cuenten con esa documentación, adoptarán una decisión al respecto.

El ascensor arrastra problemas en el servicio desde hace ya más de una década. Ya en 2010, alertaban de que la construcción de rampas y escaleras mecánicas en la misma zona les había restado clientes y les había situado en una difícil coyuntura.

LANZADERA DE BILBOBUS

Por el momento, un servicio especial de Bilbobus cubrirá el trayecto que actualmente efectúa el ascensor de Solokoetxe a partir del mismo lunes. La lanzadera la prestará la línea I5 y tendrá su parada de origen en la Plaza Tomás Meabe, en el número 8 de la calle Iturribide y llegará hasta el 17 de Solokoetxe, sin paradas intermedias.

El horario del servicio será de 07.00 a 23.00 horas de lunes a domingo. El primer autobús saldrá desde Iturribide a las 07.00 horas y, los siguientes, a y 20 y a y 50, mientras que desde Solokoetxe, la salidas serán también cada media hora, a y 10, y a y 40.

El billete deberá pagarse en efectivo y tendrá un coste de 30 centímetros por trayecto.

INAUGURADO EN 1935

El ascensor fue diseñado por Emiliano Amann e inaugurado en 1935. Originalmente se accedía desde una entrada independiente en la planta baja de un edificio de viviendas y la torre del ascensor contaba con dos cabinas para ocho pasajeros cada una.

Tenía una altura de treinta metros, estaba exenta del edificio y se alzaba hasta alcanzar la cota más baja de Solokoetxe. La unión de la torre con la zona se realizaba a través de una pasarela de hormigón que a medio camino contaba con una garita de acceso.