Septiembre, mes de vuelta a colegio, a la universidad y al trabajo es ahora un escenario de incertidumbre. El cambio de hábitos está haciendo mella en Bilbao, ciudad financiera y comercial. El teletrabajo pierde clientes y reducir los contactos sociales “resta”, señalan comerciantes y hosteleros que ya han tenido que soportar este verano un 40% menos de facturación con respecto a otros años. Temerosos de que la situación no se pueda controlar antes de una nueva campaña de Navidad, trabajan para fortalecer “la calidad y generar comunidad” como armas contra la pandemia. El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, participó ayer en la reunión del Comité Asesor del Plan de emergencias covid y en esta primera semana el equipo de gobierno mantendrá reuniones con todos los concejales para afrontar el futuro de la ciudad, así como los nuevos presupuestos marcados por las actuales necesidades de la villa.

Todo ha cambiado. Un repartidor de una cadena de pizzas se quejaba a unos clientes de lo que para ellos está suponiendo el pago con tarjeta. “Adiós a las propinas. Si antes podíamos llegar a conseguir hasta 20 euros en una semana ahora no nos dan nada”. Los hosteleros están preocupados porque el teletrabajo ha restado una parte importante de la clientela que alimentaba los ingresos gracias a las comidas y cafés de diario. También los comerciantes se ven afectados por esta nueva forma de relacionarse, que reduce los contactos sociales y, como consecuencia, el consumo.

Para hacer frente a esta situación comerciantes y hosteleros son conscientes de que necesitan el apoyo de las instituciones, además de trabajar la diferenciación.

El gerente de BilbaoCentro, Jorge Aio, constata que “la situación es complicada por el propio consumo, porque los mensajes lo retraen y porque nos encontramos con una nueva campaña en la que se nos habla de mínimo contacto social y menos permanencia en la calle”. Frente a esto, “estamos trabajando en la línea de diferenciarnos. Tenemos que distinguirnos por la calidad y transmitir una actitud positiva. Recurrir a nuestro proprio ADN, el asesoramiento, la cercanía, garantizar la seguridad y fomentar que se compre en el entorno”. Pero junto a esto ve indispensable el apoyo institucional, “nuevos bonos institucionales, ayudas empresariales, ERTE...”. El gerente de BilbaoCentro defiende la necesidad de “promocionar el consumo como un bien social” y para ello reclama algunas medidas que lo favorezcan como pueden ser herramientas fiscales, legal.

Un 15% de hosteleros sin abrir

Bilbao es una plaza económica fuerte y “el teletrabajo aleja a los consumidores”, se lamentan hosteleros y comerciantes. “Todo lo que saca a la gente de la ciudad es perjudicial para el hostelero y el comercio”, advierte Aio.

La situación todavía es más complicada para la hostelería. “Mucha gente que habitualmente se quedaba a comer en Bilbao ha dejado de hacerlo”, expone Héctor Sánchez, gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia. No es el único varapalo que sufre el sector. “Hay empresarios con ERTE, la gente del ocio nocturno no sabe qué hacer y los hoteles sufren un agujero muy importante con el desplome del turismo”, señala. De los alrededor de 7.000 locales de hostelería que hay en Bizkaia, un 15% no han abierto aún desde el confinamiento lo que hace pensar a Sánchez que ya no están en disposición de abrir sus negocios. De cara a los próximos meses y dada la situación reclaman apoyo y asesoramiento institucional. Entre otras peticiones van a tratar de que la ocupación temporal de espacio para terrazas se extienda mientras dure la pandemia. “Las terrazas son básicas para los hosteleros en estos momentos”. Aunque no será como en verano porque el tiempo es un condicionante, les permitirá compensar, en parte, la ausencia de clientes en el interior. Según afirma, la facturación este año ha bajado un 40% y ahora les preocupa que de cara a la próxima campaña, la de Navidad, el desplome sea aún mayor. “Tememos que la limitación del número de personas en los grupos dinamite las celebraciones de empresas”, advierte. Esto sería un nuevo mazazo para un sector tremendamente afectado por la pandemia.

Un botón de muestra de esta situación son el número de pasajeros que movió Bilbobus -que recuperará el lunes los horarios de invierno en su totalidad salvo en el caso del gautxori que mantendrá la limitación-, durante el pasado mes y que fue un 40% menor respecto a agosto del pasado año.

Polideportivos abiertos

Frente a la incertidumbre que se vive todos los implicados apuestan por intentar recuperar la normalidad y convivir con las nuevas normas de la manera más natural posible. En esta línea ayer Bilbao Kirolak, finalizó su plan de reapertura de todos los Polideportivos municipales de manera que las instalaciones de Atxuri, Abusu-La Peña, La Casilla, Deustu y San Mamés vuelven a ofrecer sus servicios. Se suman así a los Polideportivos de Artxanda, Zorrotza, Errekalde, Txurdinaga, San Inazio y Miribilla, que ya han estado funcionando en verano.

La apertura de los 11 Polideportivos de Bilbao Kirolak quiere ser un paso más para que la ciudad pueda recuperar aunque sea en parte cotas de actividad que ya tenía antes del covid 19. De momento, solo podrán utilizar los polideportivos municipales las personas abonadas a Bilbao Kirolak, salvo para el uso de canchas que se permitirá el acceso a las personas no abonadas con entrada o bono. Los aforos seguirán estando limitados al 50% en el caso de fitness y al 60% en el caso de las piscinas cubiertas, para el uso de éstas será necesario la reserva previa.

“Los mensajes están retrayendo el consumo. Tenemos que generar comunidad y transmitir una actitud positiva”

“Es imprescindible contar con el apoyo institucional con bonos, ayudas, ERTE... para superar esta situación”

Gerente de BilbaoCentro

“Tememos lo que pueda pasar en Navidad si continúa las limitaciones de grupos en diez personas”

“Vamos a tratar de que la ocupación de espacio para terrazas se prolongue porque son vitales ahora”

Gerente de la Asociación de Hostelería