Sestao aplaude a su campeón de jiu-jitsu, Oscar Fernández

Sestao cuenta con deportistas de muchísimo nivel y uno de ellos es Oscar Fernández Calderón, medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de jiu-jitsu celebrado este mes en Las Vegas. Para reconocer este gran triunfo, ayer al mediodía tuvo lugar un homenaje en el Ayuntamiento de Sestao, reconocimiento al que acudieron, además de representantes institucionales, familiares, amigos y alumnos de Oscar Fernández. Así, ante un salón de plenos lleno hasta la bandera, Oscar recibió de manos del alcalde de Sestao, Gorka Álvarez, un galardón con la figura del emblemático Horno Alto. “Es un orgullo para nuestro pueblo contar con alguien como tú, que nos demuestra cada día que, con trabajo duro y corazón, todo es posible”, le señaló el primer edil.

Óscar siempre ha estado muy ligado a su pueblo, Sestao, y al mundo del deporte. En este aspecto, antes de dedicarse al jiu-jitsu, fue guardameta de las categorías inferiores del Sestao River, pero, donde, sin lugar a dudas, ha encontrado su gran pasión ha sido en este arte marcial. “Empecé a practicar jiu-jitsu por mi primo, quien ha acabado siendo mi profesor. Vive en Barcelona, pero vino aquí a una competición, fui a verle y después probé a practicarlo y me enganchó. Lo que más me gusta es que es un deporte en el que prima la técnica por encima del resto de cosas”, indicó Óscar, quien trabaja en un conocido local hostelero de Sestao y, además, desde hace tres años dirige la escuela de artes marciales Basque Jiu Jitsu Academy. El camino hacia el bronce mundial es largo, tortuoso y hay que invertir mucha dedicación y trabajo. Todo ese sacrificio cobró sentido cuando se colgó la medalla. “Este bronce mundial es algo por lo que llevo trabajando mucho tiempo. Trabajo por intentar ser el mejor y esta medalla es el reconocimiento a muchos años de trabajo y dedicación. Al colgarme la medalla sentí muchísima felicidad y sentí que todo el trabajo realizado recibía recompensa, que había merecido la pena”, aseguró Oscar a quien sorprendió la gran afluencia de personas al homenaje de ayer.

Y es que el salón de plenos se quedó pequeño para todos los familiares, amigos y alumnos que acudieron a aplaudir y felicitar a Oscar Fernández. “Me ha sorprendido ver a tanta gente porque yo sólo se lo había comentado a gente muy cercana. Se han organizado ellos entre todos para darme esta sorpresa. Es algo precioso que te reconozcan en casa, pero me pone más nervioso este tipo de cosas que cualquier competición”, indicó Oscar, quien desde su academia ve cómo el futuro de esta práctica en Sestao es brillante. “Hay mucho nivel y espero que mi academia siga creciendo”, reconoció el flamante medalla de bronce del Campeonato del Mundo de jiu-jitsu.

Que su academia siga evolucionando es uno de los objetivos que se marca a corto y medio plazo, además de seguir brillando a nivel internacional. Para todo ello, seguirá el mismo camino que le ha llevado hasta aquí: “trabajo, dedicación y sacrificio”. Todo ello, unido a una técnica privilegiada es lo que ha hecho que Oscar luzca con orgullo esa medalla de bronce que en el homenaje de ayer brillaba con luz propia.