"Vivo frente a la estación de Renfe viendo todos los días pasar trenes que no puedo coger"

Medio centenar de personas han secundado este miércoles una concentración en la estación de Renfe en San Miguel, de Basauri, para reclamar y exigir la accesibilidad universal en la línea C3,además de mejoras en las frecuencias de los trenes, horarios más ajustados a las necesidades de los usuarios, un sistema de información en tiempo real a los viajeros o la instalación de los apantallamientos ya aprobados para mitigar los efectos del ruido.

Son muchas las demandas y necesidades en esta línea de transporte público que conecta Bilbao con Orduña, pero lo que más preocupa e indigna a las personas usuarias es la falta de accesibilidad a estaciones y vagones. Así lo ha explicado Marisa Castro Delgado, vecina de la capital vizcaina que se ha trasladado hasta San Miguel, acompañada de su inseparable scooter adaptado, para mostrar su apoyo a la concentración convocada conjuntamente por Sagarrak Ekologista Taldea, Ekologistak Martxan, la Asociación de Vecinos de San Miguel de Basauri, Biziz Bizi y ConBici y que ha contado, además, con el apoyo y presencia de integrantes de la Plataforma de Personas con Movilidad reducida y el Movimiento de Pensionistas de Bizkaia y Aiaraldea.

"Para llegar hasta aquí he tenido que venir en autobús, porque en tren es imposible", ha denunciado Marisa Castro que reside "frente a la estación de Abando de Bilbao, viendo todos los días pasar unos trenes que no puedo coger".

Megáfono en mano, ha ido desgranando los dos principales inconvenientes que personas con movilidad reducida encuentran en el servicio ferroviario de cercanías. "Ascensores que no funcionan y, sobre todo, la distancia entre el andén y los vagones que, especialmente, en la línea C3 es insalvable", ha incidido. Todo ello hace imposible que pueda utulizar este medio de transporte "para ir a ver a amigos de Basauri de Arrigorriaga..." cuando la accesibilidad universal "es un derecho que, en este caso, las administraciones públicas nos están negando".

Sobre el proyecto piloto de recrecido parcial de andenes anunciado por el Gobierno vasco en las estaciones deAbando, en Bilbao, y en la de Orduña, los usuarios son escépticos porque "aún no han dicho nada sobre cómo se van a salvar los escalones que hay en las puertas de los vagones".

Por ello su petición es clara: "tienen que traer las unidades adaptadas prometidas y no se puede alargar más tiempo la espera".

Dos años con un ascensor averiado

Un esfuerzo extra para acudir la concentración ha tenido que realizar también Luis Miguel García, 'Pibe', con movilidad reducida a causa de las secuelas de un ictus que afecta a la parte derecha de su cuerpo. En su caso, ha tomado el tren en Basauri "que ya es complicado porque la distancia que hay entre el andén y el vagón es impresionante".

Salvado ese escollo, lo que no se esperaba 'Pibe' es encontrarse con uno de los ascensores entre andenes de la estación de San Miguel averiado. "Me he puesto de muy mal humor. No me lo creía", ha declarado. A pesar de ese impedimento, ha logrado sumarse a la concentración, aunque "ahora creo que me voy a volver a Basauri andando y son casi 2 kilómetros de distancia".

Representantes de la Asociación de Vecinos de San Miguel también han estado en la protesta y han denunciado la situación de un elevador "que lleva ya dos años fuera de funcionamiento", han asegurado. Las quejas interpuestas han sido múltiples y numerosas, pero "con la excusa de las competencias, se tiran el balón de una administración a otra". Y la única respuesta que reciben es que "tiene que llegar una pieza de Alemania".

Su último movimiento ha sido trasladar la problemática a Nerea Rentería, ex concejal de Basauri y actualmente diputada del Grupo Vasco por Bizkaia en el Congreso, "para que defienda allí nuestros intereses" y no descartan recurrir también al Ararteko.