El Ayuntamiento de Durango ha abierto el plazo para que las personas productoras soliciten una licencia para participar en el Mercado Baserritarra durante el año 2026, un programa municipal que impulsa el comercio local y de proximidad. Las solicitudes podrán presentarse hasta el 15 de diciembre de 2025 en el Servicio de Atención a la Ciudadanía (SAC), mediante la hoja disponible en la web municipal. La nueva edición del Baserritarra se celebrará en la plaza central del renovado Durangoko Merkatua, ubicación que se consolida como definitiva tras la fase de prueba realizada durante los sábados 15, 22 y 29 de noviembre, donde tanto baserritarras como ciudadanía valoraron positivamente el nuevo espacio cubierto por su accesibilidad, comodidad y ambiente animado.
Asimismo, hoy finaliza la convocatoria pública para adjudicar cinco nuevos puestos comerciales dentro de Durangoko Merkatua. La tasa de ocupación establecida es de 11,32 euros por metro cuadrado al mes, lo que supone un coste anual de entre 1.967,94 y 5.428,80 euros según el tamaño del puesto. La concesión tendrá una duración inicial de un año, prorrogable hasta un máximo de diez, y las solicitudes deben presentarse a través del Perfil del Contratante disponible en la web municipal.
En el marco de la dinamización del mercado, el Ayuntamiento ha organizado un programa de actividades gastronómicas que se desarrollarán a lo largo de diciembre. Todas las sesiones tendrán un aforo limitado a 40 personas, se celebrarán de 18.00 a 20.00 horas y requerirán inscripción previa mediante un formulario disponible en la web municipal. Así, tras la demostración de corte de jamón y degustación que tendrá lugar hoy, el 10 de diciembre se celebrará una sesión dedicada a los encurtidos, y el 18 de diciembre se organizará una jornada dedicada a los productos lácteos.
Satisfacción
El impulso al mercado coincide con las valoraciones positivas que ha recibido la renovada Merkatu Plaza en sus dos primeras semanas de funcionamiento. Comerciantes, hosteleros y responsables municipales coinciden en que la reforma ha devuelto la vida a un espacio que llevaba tiempo esperando resurgir. La alcaldesa, Mireia Elkoroiribe, ha destacado que la ciudadanía ha respondido con entusiasmo, recuperando la costumbre de comprar producto local en un entorno renovado, accesible y cómodo. Desde la hostelería, el responsable del bar Arripu asegura, además, que el ambiente ha superado sus expectativas y que la presencia de un local dentro del mercado está generando un flujo constante entre clientela y comercios. También desde puestos tradicionales, como la carnicería Amezua, se constata la llegada de nuevas personas usuarias, incluida gente joven, además de la fidelidad del público habitual.
La plaza del mercado empieza a consolidarse como un espacio idóneo y amable para acoger actividades complementarias a la oferta comercial.
