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Axular Casado, campeón del mundo de agility

El durangarra se impuso con la selección estatal en la cita celebrada en Suecia

Axular Casado, campeón del mundo de agilityAxular Casado Aginako

Con cariño recuerda “la matraca” que les dio a sus padres para que le dejaran tener un border collie. El vecino de Durango Axular Casado tenía 13 años y tuvo que esperar hasta los 17 para conocer a Arin, su primer perro. Residente en Zaldibar, se acaba de proclamar campeón del Mundo de agility con la selección estatal en Suecia. Una gesta histórica para un deporte que requiere velocidad, concentración y, sobre todo, una compenetración perfecta con el animal. “Para mí el agilitiy es mi vida; lo es todo. Mi día a día es esto: me levanto, saco a los perros, entreno, cuido el terreno… todo gira en torno a ellos. El vínculo que creo con los perros me llena; no podría vivir sin ellos”, reconoce agradecido a sus animales.

Fue en su primer verano con Arin cuando Axular descubrió que la raza de su perro que tanto quiso desde el principio era muy popular. De vacaciones en un camping de Cantabria “vi un montón de border collies iguales al mío. Yo pensaba que el único que tenía uno era yo, pero resulta que había un montón. Curiosamente, muchos de ellas iban a tomar parte en un campeonato de agility. Fuimos a verlo, empecé a tener trato con uno de los participantes y así descubrí este deporte”. 

De vuelta a casa, no hubo marcha atrás. Axular se compró obstáculos, empezó a entrenar en un pequeño terreno del municipio de Iurreta dedicándole cada vez más horas a un deporte por entonces poco conocido en la zona. La afición se transformó en vocación, y en 2008 el durangarra fundó el Club Agility Iurreta, con el apoyo incondicional de sus padres. “Ellos fueron clave, me ayudaron un montón a poder dar el paso. Pudimos fundar el club y fueron más aficionados los que comenzaron a probar el agility. Con la puesta en marcha del club pudimos organizar pruebas y actividades, y poco a poco consolidamos el agility en Durangaldea”.

Ese vínculo siempre especial con los perros lo llevaron también a formarse como adiestrador profesional. De este modo, Axular pasó un año trabajando en Menorca y otro año y medio en Asturias, siempre ligado a su gran pasión. 

'Eywa' es un border collie

En la actualidad, convive con cinco perros: Turuk, Jeik, Eywa, con la que conquistó el mundial, Eko, un cocker que rompe la hegemonía de border collies y Ney, una cachorra de apenas tres meses que acaba de llegar. “Los perros me aportan lo que no me dan los humanos. Es fuerte decirlo, pero lo siento así. Son muy nobles y nunca te van a traicionar. Es cómo te miran, cómo te siguen, cómo te piden, cómo te reciben… lo son todo para mí”.

Campeón del mundo

Las lágrimas en Suecia tras convertirse en campeón del mundo han sido muy especiales para Axular. Y es que la selección estatal llegaba con deportistas experimentados y de los más rápidos, aunque siempre bajo la sombra de Alemania, la gran potencia actual del agility. “Éramos también favoritos, pero había que imponerse a la seguridad y fortaleza germana. Cuando quedamos campeones, se nos cayeron las lágrimas. Ganar un mundial es complicadísimo, sobre todo viniendo del sur de Europa. Allí en el centro tienen muchas más competiciones, compiten más entre ellos, y eso se nota mucho en este tipo de campeonatos”.

Para quien lo ve desde fuera, el agility puede parecer una simple carrera de obstáculos canina, pero por detrás hay muchísimo trabajo. Es un deporte de precisión milimétrica y de complicidad absoluta con el perro. “Lo más difícil es la coordinación, ese timing que necesitas para hacerlo bien en la pista. No sabes qué recorrido habrá hasta que lo ves el mismo día, y tienes siete minutos para estudiarlo sin el perro. Luego toca dirigirlo con órdenes verbales y corporales, y que no haya errores. Eso es lo difícil, que te escuche, te vea al mismo tiempo, no se confunda lo que les estás diciendo porque generalmente los que nos confundimos somos nosotros, los guías. Ellos nos hacen caso, nos siguen”.

Axular Casado se acaba de proclamar campeón del mundo de agility

Por otro lado, cada recorrido es distinto y cada juez plantea retos nuevos. Por eso, la preparación no cesa en el día a día . En este sentido, Axular es consciente de lo importante que es la constancia y la dedicación a sus animales. “Esto es 24 horas, 7 días a la semana. Aunque no entrenes porque tienes que dejarle descansar al perro, la preparación es total. Son deportistas de élite: los tenemos que tener con comida bien pesada al gramo, llevarlos al monte para que cojan esa condición física, esa potencia y agilidad que necesitan. Son muchas horas de entrenamiento, pensar cómo prepararles para no cansarles en exceso y que el entrenamiento sea eficiente”.

Mundial en Finlandia

En lo que a próximos objetivos se refiere, en primavera comenzarán las pruebas selectivas para ir al próximo Mundial, que se celebrará el año que viene del 22 al 27 de septiembre en Finlandia. “Estamos entre los favoritos, pero hay que conseguir el pasaporte. El objetivo es volver a ganar, y si puedo hacerlo en individual, mucho mejor. Ese es el gran sueño que quiero conseguir”, asegura ambicioso. 

En su voz no hay soberbia, sino una mezcla de pasión, ganas de seguir trabajando y convicción de que esas son las claves para recoger la recompensa. Lo que empezó siendo una curiosidad adolescente en un camping cántabro, hoy es un proyecto de vida. Y tras conquistar el oro mundial, queda claro que Axular Casado quiere más. “Me gustaría ser el mejor de la historia en este deporte. No es porque me recuerden a mí ni nada por el estilo; es ambición y siempre quiero ganar. Soy competitivo y tengo buen perder; la derrota no me afecta en absoluto”.