Empiezan las obras de restauración de la cubierta de Molinos Vascos

La "inacción de los propietarios" ha obligado a la Diputación de Bizkaia a reparar por su cuenta, de forma subsidiaria, el edificio Molinos Vascos para evitar su desplome. El ente foral pone sobre la mesa 1,2 millones de euros para reformar el tejado, una obra que tendrá un plazo de 9 meses y concluirá a mediados del próximo año.

Con esta actuación se garantiza un futuro uso del inmueble, que está catalogado como patrimonio cultural desde 2009, y del que la Diputación no descarta un futuro uso público. Como diputada de Cultura, Euskera y Deportes, Leixuri Arrizabalaga, ha asegurado esta mañana que el ente foral siempre busca espacios para desarrollar actividades públicas que beneficien al conjunto de los ciudadanos.

Actuación de urgencia

Actualmente, el tejado del edificio presenta "un alto grado de deterioro" y se encuentra "en un rápido y activo proceso de degradación que, de no detenerse de inmediato, podría conducirle a la ruina irreversible a medio plazo", ha recordado la también portavoz de la Diputación al término del consejo de gobierno.

Esta situación, ha alertado Arrizabalaga, "podría arrastrar a la ruina definitiva la estructura de hormigón y los cerramientos de las fachadas exteriores".

Con esta rehabilitación, que "no alterará las características arquitectónicas del edificio ni su edificabilidad", se reconstruirá la totalidad de las cubiertas. Así, se derribarán de forma completa las cubiertas actuales, retirando y sustituyendo todos aquellos elementos en mal estado, como cerchas de pendolón, vigas, correas y solivos, además de construir un nuevo entablado con panel "tipo sándwich" bajo las tejas, ha precisado.