Los contactos entre el departamento de Educación y Osotu iniciados el lunes han desembocado en “una oferta que abre una vía real a la solución”, desvelaron familias del colegio de Güeñes ayer durante una comparecencia frente a la sede del Gobierno vasco en Bilbao. La noticia ha despertado “esperanza”, pero “la incertidumbre” sobre la continuidad del centro “no ha desaparecido” para los padres y madres de los 200 alumnos y alumnas de Infantil y Primaria.
“La propuesta que se nos ha trasladado se concreta en dos puntos fundamentales”, desgranó Aitor García, presidente de la AMPA. Por un lado, “que se incluya en el Consejo de Gobierno del lunes la subvención correspondiente al año 2025”. Apuntan que el acuerdo suscrito con Educación en 2023 recogía un importe equivalente “al 90% de lo que tocaría de ser un centro concertado”.
Por otro, conversaciones que articulen “una solución de continuidad; hemos pedido el concierto, pero estamos abiertos a dialogar cualquier otra opción que nos permita, de manera permanente, asegurar la supervivencia”.
El Gobierno vasco recuerda que “la situación económica de Osotu depende únicamente de su gestión privada”. En este sentido, “cabe aclarar que su situación no guarda relación alguna con la ayuda extraordinaria en trámite para valorar el interés pedagógico del proyecto, y cuya resolución está prevista en el próximo Consejo de Gobierno”.