Como cada 4 de julio, Elorrio ha rendido homenaje esta mañana a San Valentín de Berrio-Otxoa, copatrón de Bizkaia e “hijo del pueblo”, como lo describen orgullosos sus vecinos. La jornada ha arrancado a las 10.00 horas con la misa en el convento de Santa Ana, seguida de la kalejira de txistularis por el casco viejo. A mediodía, a las 12.00, se ha celebrado la misa mayor en la Basílica de la Purísima Concepción, presidida por el obispo y acompañada por el coro, antes del tradicional almuerzo popular a las 13.00 horas.

A la cita no han faltado representantes institucionales como la presidenta de las Juntas Generales, Ana Otadui, y el concejal del PNV de Elorrio y parlamentario vasco, Mikel Arruabarrena. También se ha podido ver entre los asistentes a Gloria Urtiaga, viuda del Lehendakari José Antonio Ardanza, acompañada de su nieto.

En la entrada de la Basílica, el puesto de las monjas dominicas ha vuelto a reunir a decenas de fieles y curiosos, con rosquillas, mostachones, lenguas de gato, medallas, pulseras de plata y la popular crema calmante elaborada en el convento. “Para mí es un privilegio poder ayudar. Aunque nací en Venezuela, mis padres me inculcaron el valor de estas tradiciones”, contaba Lani Viteri Lazcano, voluntaria venezolana con raíces familiares en Elorrio.

Voluntarias en el puesto de las monjas dominicas N.Murray

Para muchos elorrianos, la devoción por su patrón sigue intacta. “Tenemos una joya y no sabemos apreciar lo que tenemos en nuestro pueblo. Es un mártir que ha dado la vida por todos y tenemos la suerte de tener este santo, que no todo el mundo puede tener”, recordaba emocionada Mari Tere Martínez, cristiana de la parroquia local. También Ana Otadui subrayaba la importancia de esta fecha: “Es un día muy especial para todos los de Elorrio, sobre todo si somos creyentes. Celebramos un año más la fiesta de nuestro patrón”.

Sin embargo, no han faltado las críticas. Mikel Arruabarrena, ha lamentado los recortes que están afectando a la tradición: “Están haciendo recortes todos los años para dejar morir la tradición. Es criticable y un gesto feo por parte de EH Bildu”. Entre las reducciones, señala la supresión del paseíllo previo a la misa mayor y la disminución de hamburguesas Label, preparadas por la asociación Iturrizoro elkarteartea, que este año han pasado de 1.200 a solo 800.

Fieles durante la misa mayor en honor a San Valentín de Berrio-Otxoa N.Murray

Aun así, la Cofradía de Berrio-Otxoa ha vuelto a reunir a fieles, vecinos y visitantes, incluso cofrades llegados desde Sevilla, para cantar el himno y compartir mesa. Un año más, San Valentín de Berrio-Otxoa demuestra que su devoción y su tradición siguen vivas en Elorrio.