Ainhoa Basabe: “Ha sido todo un orgullo ser alcaldesa de Sestao”

Las etapas en la vida comienzan y acaban. La etapa en la política municipal de Ainhoa Basabe empezó hace 14 años como edil y acabó ayer, día en el que dejó de forma oficial su cargo de alcaldesa de Sestao. Ha sido la primera en la historia. Basabe deja el cargo “con el corazón lleno de gratitud”, pese a los ataques sufridos por una minoría, ataques que se han dirigido hasta a su familia.

¿Cómo se siente una vez ya se ha hecho efectiva su renuncia al cargo?

—Han sido días de muchos nervios, de darle muchas vueltas a qué decir y qué no decir en el discurso de despedida porque había que hacer un discurso muy medido. La situación ha sido difícil porque el salón de plenos estaba lleno, pero de mi etapa en el Ayuntamiento de Sestao me quedo sólo con todo lo bueno, porque con las cosas malas, que las ha habido, hago borrón y cuenta nueva. Me quedo con el cariño que he recibido y que sigo recibiendo por parte de la gente. Me voy con el corazón lleno de gratitud.

¿Cuál es el recuerdo que más grabado lleva de estos 14 años en el Ayuntamiento de Sestao?

—La verdad es que son muchísimos recuerdos. En mi primera legislatura en la que llevé Comercio y Educación mi pelea fue la creación de una nueva haurreskola y se logró. Ese es un recuerdo bonito de aquella legislatura y luego se han hecho otras muchas cosas. Tengo muchísimos buenos recuerdos porque se han hecho muchas cosas y he creado muchas amistades en este Ayuntamiento que se quedarán siempre conmigo.

Ha sido la primera alcaldesa en la historia de Sestao. ¿Eso le ha añadido presión o vértigo?

—No. Al final llegué para gestionar el Ayuntamiento lo mejor que podía, soy consciente de que he cometido errores como todo el mundo. Me ha dado más reparo ciertos tratos que, a día de hoy, no son igualitarios. Sigue habiendo muchas diferencias por el hecho de ser mujer. Cuando un hombre es recto es un su trabajo se toma como una virtud, pero cuando lo hace una mujer se habla de prepotencia y autoritarismo. Eso sólo se ve cuando una está dentro. Sigue habiendo mucho trabajo por hacer. En estos cuatro años las cosas han mejorado, hay cambios, pero son muy lentos. Habrá que seguir rompiendo esos techos de cristal.

Usted sabe lo que es empezar como alcaldesa a mitad de una legislatura. ¿Eso influenció en la toma de la decisión de dejar el cargo?

—Esa es una decisión que no tomo yo, es una decisión que se toma desde el partido de forma consensuada con todas las partes implicadas. Yo dije que ésta iba a ser mi última legislatura y me puse a su disposición para el relevo cuando ellos lo creyeran oportuno. Ese momento ha llegado. Es algo bueno porque quien toma el relevo tiene dos años previos a la campaña electoral para conocer el Ayuntamiento, los proyectos... Es un paso importante.

¿En qué momento siente que su etapa como alcaldesa debía de llegar a su fin?

—Han sido muchos factores. Los 14 años que llevaba ya en el Ayuntamiento y los problemas del día a día van cargando la mochila y antes de pasar al hastío, lo mejor es dar el paso de marcharse. Además, todo el problema que estamos viviendo en los ayuntamientos de la falta de funcionarios y de habilitados nacionales es otra mochila pesada porque te das cuenta de que la tramitación se para porque no tienes con quién realizar las tramitaciones a cabo. Estar dos años sin un secretario de habilitación nacional y más de año y medio sin un interventor, prácticamente te paraliza un Ayuntamiento. Lo hemos ido cubriendo como hemos podido, pero eso genera una sobrecarga de trabajo en esas personas que asumen esas funciones. Aun así, hemos logrado hacer todo lo que me había propuesto.

¿Con la renuncia a la Alcaldía de Sestao da por finalizada su trayectoria política?

—Ahora voy a intentar tomarme unos días tranquila intentando reflexionar muchas cosas. No me veo en un cargo político con exposición pública. La exposición pública te quita mucho tiempo y en estos 14 años he invertido en Sestao mucho tiempo que le he quitado a mi familia y amigos. Sí me veo trabajando por y para mi partido, EAJ-PNV, es el proyecto en el que creo y no veo otro mejor.

¿Qué le diría a la ciudadanía sestaoarra?

—Que ha sido un orgullo ser su alcaldesa, que estaré eternamente agradecida a todos ellos y que seguiremos viéndonos por las calles de nuestro municipio.