El harrijasotzaile Inaxio Perurena entusiasmó con su exhibición a las numerosas personas que ayer domingo hicieron un alto en su visita a los diferentes espacios generados en la XXIII edición de la Feria agrícola y ganadera del barrio trapagarandarra de La Arboleda para disfrutar en el patio del albergue foral de sus evoluciones con las piedras cilíndricas, rectangulares, cúbicas y esféricas. Una exhibición a la que el de Leitza añadió explicaciones sobre la técnica del levantamiento de las diferentes piedras, la preparación ante el levantamiento, las resinas, el gerriko...

Un compendio de impresiones que sirvió para que cada serie de levantamientos se acompañara de fuertes aplausos de los espectadores que, entre las fases de la exhibición, asistieron a las finales del Open de Bizkaia femenino de levantamiento de piedra, de transporte de saco, de ambos sexos, como la final masculina de levantamiento de fardo.

Despedida de Perurena

“Este es un deporte que, aunque no lo parezca, mezcla maña y fuerza. Si yo voy a levantar, por ejemplo, con una mano 188 kilos, ahí se ve claramente que por mucha fuerza que tengas necesitas una técnica para que salga perfecto. La gente sí que se sorprende por ver levantar con una mano, pero si explicas detalles como la forma de colocar y recoger el pie, los apoyos en el pecho, la nivelación, etc. la cosa cambia”, detalló el navarro, que anunció a DEIA que el próximo año –con 41 eneros cumplidos – dejará el actual ritmo en este deporte “tan exigente”.

“Castigas mucho la carrocería, las rodillas, la zona lumbar. El año que viene haré la temporada normal y cuando finalice me volcaré en mi profesión de masajista, aunque seguiré poniéndome el chaleco y el gerriko para seguir entrenando en casa, pero ya de otra manera, disfrutando de la piedra”, señaló este morrosko de 1,95 y 130 kilos de peso donde la grasa no afecta a su atlética y fornida figura.

“Cuando levanté los 302 kilos hace diez años pesaba diez kilos más”, recuerda Inaxio, que no tiene claro que sus hijas sigan la estela familiar abierta por el gran Iñaki Perurena. “No lo veo y desde luego no voy a intentar que les guste. Eso es cosa suya porque si tú las animas sin que realmente les guste”, señala Inaxio quien, por contra, ve muy esperanzadora la incorporación de la mujeres. “Frente a años atrás donde la cantera era el mundo rural, del caserío y sobre todo masculino, tenemos la suerte de contar con espacios como el crossfit o el fitness donde hay gente curtida en pesas y gimnasio a las que les llama la atención este reto deportivo y eso está muy bien. La base del gimnasio ya la tienen y casa muy bien con el deporte rural”, sostiene el harrijasotzaile.

La cita agro ganadera y artesanal de La Arboleda ofreció ayer a los miles de visitantes que acudieron al enclave trapagarandarra, diferentes alternativas para todos los públicos, desde los más pequeños, con juegos y diversas actividades en el pórtico de la Iglesia Santa María Magdalena, al público familiar con la oferta desgranada en más de cuarenta puestos y casetas en las dos zonas de aparcamiento situadas a la entrada del poblado minero, y a los paladares más exquisitos con catas comentadas en una carpa en el patio delantero del albergue.

Autobús especial

Una oferta global que sedujo nuevamente a miles de visitantes que, en buena medida, se acercaron a la feria a través del transporte público tanto de Bizkaibus –que habilitó para la jornada un autobús oruga en la línea A3333– como del funicular de Larreineta que ayer domingo varió sus frecuencias habituales para posibilitar que las unidades se pusieran en marcha una vez llenas de viajeros. “La verdad es que estamos muy contentos de cómo ha salido todo”, señalaba satisfecha la presidenta de la Asociación de Ganaderos La Ronda, que ayer avanzó que están a tan solo dos años de celebrar las bodas de plata de este evento que, salvo en el caso de la pandemia, ha resistido contra viento y marea.

“Quién les iba a decir a aquellos ganaderos y vecinos que hace 24 años la pusieron en marcha que esta feria se ganaría el favor del público durante tantos años haciendo que La Arboleda y Trapagaran contribuyan, de esta manera, a la difusión y apoyo al sector primario vizcaino”, valoró Iratxe Ríos maestra de ceremonia en la entrega de los premios repartidos entre los 31 ganaderos de la comarca que ayer presentaron lo mejor de su cabaña, cerca de 230 animales, que formaron parte de la singular aula de la naturaleza.