"Me mandaron aquí por una depresión muy fuerte y cada día que venía me iba encontrando más a gusto. Otros compañeros están en situaciones más complicadas, pero gracias a Etxepel ya no viven en la calle; se sienten útiles y necesarias. Nos han dado la ayuda necesaria para empezar de cero porque estar en Etxepel es estar en casa”, relataba Patxi, una de las personas usuarias del espacio durangarra que cumple diez años.

Ubicado en el antiguo convento de las Siervas de Jesús en Durango, el servicio Etxepel de Cáritas fue el primer centro integral para atender a personas en riesgo de exclusión social y, diez años después de su inauguración oficial, tocaba echar la vista atrás y recordar cómo fueron los inicios de esta iniciativa que marcó un antes y un después en la atención a las personas más desfavorecidas y, en especial, a las personas sin hogar de Durangaldea. “En los inicios hubo dos factores fundamentales que marcaron y mucho lo que iba a ser Etxepel”, explicó José Agustín Maiz, por aquel entonces vicario territorial de la zona y párroco de Durango. “El primer factor fue la fortaleza de Cáritas. La Unidad Pastoral tenía mucho voluntariado y muchos programas y el segundo, mi persona. Llegué a Durango en 2010 con ganas de hacer algo por los empobrecidos y, en febrero de 2011 llegó mi nombramiento como vicario de las vicarías IV y V, un cargo que pesó mucho a la hora de poner en marcha el proyecto”, recordaba José Agustín Maiz durante el acto de celebración del aniversario que tuvo lugar ayer viernes y que contó con la presencia de personas que han sido y son parte activa del servicio Etxepel, además de representantes del equipo de gobierno del Ayuntamiento.

Amaia Escobal y Arrate Bañeres son voluntarias de Cáritas.

Sin duda, una fecha clave en la gestación del proyecto fue el 1 de diciembre de 2012. Las Siervas de Jesús, que residían en el convento decidieron ceder el edificio a Cáritas. “Han sido terriblemente generosas y sin ustedes esto no se hubiera podido llevar a cabo”, reconoció Maiz, quien también tuvo palabras de agradecimiento para el equipo de voluntarios, profesionales y usuarios que “han sabido transformar esta casa en un hogar para muchas personas”.

Así, tras dar forma al proyecto durante más de tres años, en junio de 2014 tuvo lugar la inauguración oficial de Etxepel con el objetivo fundamental de “proporcionar procesos de acompañamiento y crear plataformas de inclusión para personas con dificultades”, una labor que desde finales de 2017 cuenta también con el respaldo de la Diputación Foral de Bizkaia. “Entonces vimos que la clave de la inclusión estaba en la emoción. En poner énfasis en la necesidad de construir proyectos vitales y podemos decir que el primer servicio de día para la inclusión social se puso en marcha en Durango y se llamó Etxepel; fue el precursor y luego se fueron configurando otros hasta llegar a los veintidós actuales”, señaló el director general de Inclusión Social del ente foral, Óscar Seco.

Voluntariado

Desde hace una década Etxepel ofrece acompañamiento personalizado para que la persona que sufre esta situación de exclusión pueda desarrollar su proceso de reincorporación social. Y en este papel, es fundamental el equipo de voluntariado. Es el caso de Amaia Escobal, que es una de las última en llegar pero que no duda del enorme vínculo afectivo del proyecto. “Acompañamos a las personas que carecen de vínculos, lo hacemos a través de paseos, convivencias, salidas y diferentes celebraciones. Hemos aprendido que es posible construir una familia, a hacer visibles situaciones que a veces son invisibles, pero todas y todos tenemos algo que aportar. Recibimos mucho más de lo que damos”, puntualizó.

De cara al futuro, Idoia Pérez de Mendiola del equipo directivo de Cáritas Bizkaia, deseó que “Etxepel siga siendo una apuesta y que haya voluntariado que sustente este proyecto. Acompañamiento y apoyo, fortalecer la iglesia y trabajar por la transformación social”. Todo ello desde la empatía y el respeto y al cobijo del calor del hogar: Etxepel.

10º Aniversario

  • Etxepel de Cáritas. Es un servicio que ofrece atención integral a las personas que están sin hogar. Ofrece acompañamiento personalizado para que la persona que sufre esta situación de exclusión pueda desarrollar su proceso de incorporación social. Su puesta en marcha fue hace una década e incluye también un servicio de atención diurna para personas en situación de exclusión de la Diputación Foral de Bizkaia.
  • Objetivos. Etxepel pretende paliar los efectos de la situación de exclusión que sufren las personas sin hogar, ofreciendo acompañamiento y apoyo en todos los niveles para que pueda desarrollar su propio proyecto de vida en su entorno más cercano. Lo hace a través de una intervención socioeducativa, atención psicológica y con actividades de ocio y tiempo libre.