Las complejas obras para cubrir La Avanzada que se desarrollan en la actualidad a manos de la Diputación Foral de Bizkaia permitirán al Ayuntamiento de Leioa acometer actuaciones en el espacio que quedará libre en la superficie. En este sentido, ya está previsto crear un bidegorri que conectará el de la zona de Pinosolo con el centro del municipio, y, por otro lado, ampliar la acera de la calle Iparragirre.

La finalización de los trabajos en una de las principales arterias de las carreteras vizcainas supondrá un antes y un después para los vecinos de Leioa. Además, la pasada semana, la entidad foral les daba una buena noticia al anunciar que esta operación terminará más de un año antes de lo calculado inicialmente: en lugar de en agosto de 2026, será en verano de 2025, si no hay contratiempos. Entonces, la localidad dejará de estar partida en dos en su corazón y, además, soportará menos ruido del tráfico constante, ya que se eliminará la trinchera que ejerce de división y se colocarán 1.505 metros de pantallas fonoabsorbentes.

A ello hay que añadir las medidas que el Consistorio leioaztarra desea poner en marcha para mejorar toda esa zona y la de alrededor, con la filosofía de habilitar más terreno para el peatón y las bicicletas, tanto en clave de disfrute como de accesibilidad. Por ello, habilitará un bidegorri que se unirá al de Pinosolo y que seguirá por el de Sabino Arana, y, por otra parte, procederá a ensanchar la acera de la calle Iparragirre, hasta los 2,5 metros.

Y es que claro, el cubrimiento de La Avanzada generará nuevos espacios en superficie que ocuparán unos 10.000 metros cuadrados y que se integrarán en la trama urbana ya existente. Serán más metros de los definidos en el proyecto original, puesto que la reducción de la extensión de las cubiertas envolventes de acceso al futuro túnel, tanto desde Getxo como desde Bilbao, ha dado paso a otros 2.200 metros cuadrados transitables, que se sumarán a los ya contemplados al principio. Así que toda está céntrica área de Leioa incrementará su uso peatonal, con puntos de estancia, y terreno verde y ajardinado. “Es una actuación vital para Leioa, una deuda con la ciudadanía leioaztarra que, por fin, será saldada. Esta cubrimiento nos permitirá mejorar la calidad de vida de los leioaztarras y ayudará a cohesionar mejorar la ciudad, convirtiendo una gran herida que atravesaba el municipio en nuevas zonas de encuentro para la ciudadanía”, ha subrayado el alcalde, Iban Rodríguez, en varias ocasiones. “Ayudará a mejorar notablemente la calidad medioambiental de Leioa, algo por lo que estamos trabajando duro a través de distintas medidas municipales. Es un proyecto ilusionante y que nos motiva a seguir trabajando en la misma dirección para conseguir una Leioa más amable, viva y vivible”, ha insistido el primer edil.

Colocación de las vigas

El cubrimiento de la BI-637 –que tienen un presupuesto total que supera los 62 millones de euros– avanzan a buen ritmo, por lo tanto. La pasada semana se dio inicio a la colocación de las vigas que cierran el nuevo túnel en su tramo central y, a lo largo de este mes y en agosto, se cubrirán completamente las nuevas zonas transitables, de manera que a partir de septiembre podrá comenzar su urbanización. Más adelante, durante octubre, se llevarán a cabo las labores en las bocas del túnel con la instalación de las celosías metálicas que constituirán los nuevos emboquilles. Mientras se cimentaban las zonas a cubrir, se han construido las nuevas galerías de evacuación y la infraestructura para equipar el túnel. Se han edificado los locales técnicos junto a las entradas de la parte cubierta y las canalizaciones exteriores e interiores. Esto permitirá tender130 kilómetros de cableado para el control y alimentación del equipamiento, de los que cincuenta corresponden a cables eléctricos, otros tantos a comunicaciones y treinta a fibra óptica.