Desde el pasado mes de abril el Ayuntamiento de Ortuella mantiene activadas las labores de prevención y control de plagas de roedores e insectos, con especial insistencia en las cucarachas. Un insecto que el año pasado creó una gran alarma vecinal tras descubrirse que las mantas textiles implantadas para proteger a las plantas de los jardines del barrio de Otxartaga se habían convertido un resort de lujo para estos bichos. “El equipo de operarios del servicio contratado ha incidido especialmente en el entorno de la plaza Otxartaga”, destacó la edil jeltzale Ainhoa Hernández, quien informó que durante este curso se ha aumentado un 20% el presupuesto destinado a esta labor de control de plagas hasta alcanzar los 36.000 euros.

La empresa especializada está alternando diferentes productos para evitar la resistencia a los mismos. “Se está actuando en las zonas preferidas por estas plagas como son las zonas soleadas y en arquetas y no sobre las aceras o rincones exteriores, para evitar así intoxicaciones de otros animales o incluso de niños y niñas que puedan jugar en los parterres y verse afectados”, indicó Hernández. “Hemos empezado con los refuerzos en las zonas que el año pasado tuvieron un mayores problemas o un mayor incidencia, pero los refuerzos los hacemos en todo el municipio. Duplicamos lo que es el servicio habitual que tenemos contratado”, aseguró la concejala al tiempo que indicó que este año la campaña ha comenzado antes de lo habitual por la incidencia registrada el pasado año a finales de junio. “Por ello lo que hemos hecho es adelantar el refuerzo a la campaña habitual”, dijo.