Un numeroso grupo de vecinos, asociaciones y entidades públicas y privadas de Meatzaldea iniciaron el pasado año una campaña de voluntariado para llamar la atención de las instituciones sobre los numerosos vestigios mineros que están desapareciendo en el Biotopo de los Montes de Triano fruto del abandono minero, el olvido institucional y el empuje de la propia naturaleza otrora antropizada por la industria minera. Para ello eligieron el antiguo poblado minero de El Saúco, enclavado en el término municipal de Galdames, para poner en evidencia que en el largo proceso de la recuperación de la memoria histórica de la minería vizcaina aún hay capítulos por escribir aprovechando que el abandono aún no ha esquilmado todos los vestigios.

Fruto de aquella pulsión rehabilitadora y conservacionista –que tendrá continuidad el próximo mes de octubre– cerca de 30 voluntarios de asociaciones como los Usuarios de los Montes de Triano, Burdin Herria, la asociación de vecinos de Larreineta o el Centro de divulgación histórica Trueba, hoy día puede contemplarse el enorme lavadero con el que contaba esta importante barriada minera.

“El Saúco era un núcleo minero que se constata que estuvo habitado desde finales del siglo XIX configurándose como núcleo central de otros pequeños asentamientos en zonas como Urallaga, La Elvira y el Escachabel. En El Saúco aún se conserva buena parte del edificio de oficinas y almacén de la antigua compañía minera La Magdalena y Urallaga, cuyos aledaños serán el objetivo principal de la campaña que pretenden desarrollar los conservacionistas este otoño.

“Hay gente que piensa que allí había un hospital pero en realidad era un edificio administrativo y logístico”, apunta José Antonio Quintana, vecino de Abanto-Zierbena y apasionado de la historia de los Montes de Triano y buen conocedor de estos parajes que recorre habitualmente con su ganado.

Parajes que al igual que otras zonas de la explotación minera contaron con adelantos tecnológicos punteros en Europa pero poco conocidos como el sistema de cadena flotante o cadena sin fin. “Las vagonetas quedaban engarzadas por su parte superior a una cadena continua que enlazaba la estación superior y la inferior. Este sistema requería una instalación más costosa y se adaptaba mal a las curvas por lo que se construían secciones independientes, entre las que se situaban estaciones intermedias donde las vagonetas se soltaban de una cadena y pasaban a la otra. Las vagonetas no solían ir juntas como en los planos de cable, sino separadas unos veinte metros”, recoge Eneko Pérez Goikoetxea en su trabajo Minería del hierro en los montes de Triano y Galdames. “La mayor de todas fue la conocida como la cadenilla, construida por la compañía Urallaga y La Magdalena para bajar el mineral desde la zona de El Saúco (Galdames) hasta el kilómetro 11 del ferrocarril de Galdames, en Abanto- Zierbena. Tenía una longitud de 3.700 metros”, documenta el historiador.

Un pasado brillante cuya pujanza económica supuso la creación de diversos asentamientos humanos. “En estos poblados y otros asentamientos desperdigados por las cercanías pudieron llegar a residir entre seis y siete mil personas. En La Elvira estaba la iglesia, de la que aún existen restos, que hacía las veces de escuela a la que acudían todos los niños del entorno donde recibían clases de los maestros que subían desde San Pedro de Galdames”, rememora José Antonio Quintana quien recuerda que el auzolan será el 7 de octubre y el punto de reunión será la Ekoetxea de Peñas Negras.

“Contamos con el permiso de la Diputación y la colaboración del Ayuntamiento de Trapagaran, que ya en la limpieza del lavadero colaboró con los vecinos y entidades facilitando los materiales y utensilios para llevar a cabo la limpieza”, explicó Quintana quien reseñó que se trata de un trabajo de voluntariado. “Aquí puede venir todo el mundo que quiera colaborar en esta actividad que intenta poner en valor el barrio de El Saúco, tal como hicimos en el pasado con el lavadero para conservar nuestra historia minera”.

El apunte

El Saúco. En su época de esplendor el Saúco y los asentamientos cercanos como La Elvira o El Escachabel albergaron a más de 6.000 personas.

Auzolan. La plataforma de Usuarios de los Montes de Triano ha convocado un auzolan para el próximo 7 de octubre con el fin de limpiar el entorno del barrio de El Saúco.

Lavadero La nueva actuación rehabilitadora continúa la labor emprendida el pasado año, cuando se recuperó el principal lavadero público de la zona.