Un free tour por Ugao y una posterior visita guiada para conocer las características del retablo barroco del santuario de Nuestra Señora de Udiarraga, patrona de la villa. Estas son las dos propuestas culturales que lanza, para este fin de semana, la Cofradía de la Virgen de Udiarraga y que, tal y como precisan desde la hermandad, “son completamente gratuitas y no hace falta la inscripción previa para asistir”. Así pues, para la primera cita hay que estar mañana sábado a las 11.00 horas en el punto de partida, la plaza del Ayuntamiento, para disfrutar de un ameno recorrido por el casco urbano que no supera los 600 metros de distancia y conocer así los hechos que dieron lugar a la fundación de la villa el 4 de marzo de 1375, el origen de sus dos denominaciones actuales –Ugao y Miraballes– y algunas curiosidades acontecidas a lo largo de estos seis siglos y medio de historia.

Imagen antigua del santuario de la Virgen de Udiarraga.

La visita guiada al santuario será tras la misa dominical, en torno a las 12.40 horas, y comenzará con una explicación sobre “cómo, cuándo y por qué se construyó, en el siglo XVIII, este potente edificio cristiano barroco”, avanza el cofrade Iñaki García Uribe. Y es que, el actual templo, ubicado en un ligero promontorio para evitar que fuera afectado por las crecidas del río Nervión, es posterior a la segunda ermita levantada en honor a la patrona de la villa en el barrio de Udiarraga, a 300 metros de altitud. Fue derribado en 1776 por estar en estado de ruina, y entonces se acordó construir otra de nueva planta en las proximidades de la iglesia de San Bartolomé. El proyecto constructivo y diseño del edificio religioso fue encargado al conocido maestro arquitecto y perito agrimensor bilbaino Juan de Iturburu y, tras 20 meses de obras, los trabajos concluyeron en 1779.

Importante retablo barroco

Pero, el principal motivo de la visita guiada es el retablo que, según indica el experto en historia religiosa Txetxu Lambarri, “data de 1680 y se instala en 1680 en la ermita de Udiarraga que fue derruida”. Es obra de los maestros arquitectos cántabros Juan Alonso de Biadera y Pedro de Laynez, y se trata de uno de los retablos de madera policromada de mayor interés de Bizkaia del periodo que va de finales del siglo XVII a principios del XVIII. Una de las curiosidades de esta obra de arte eclesiástico es que “en 1775 se bajó a la villa, puesto que se iba a derribar la antigua ermita de Udiarraga, y se mantuvo guardado, troceado en partes, hasta 1778 que se colocó en la nueva”, desvela García Uribe.

En cuanto a su estructura, el retablo consta de “banco o basamento de piedra en su parte más baja, un sotabanco o pradella, un cuerpo de tres calles y ático”, explica Lambarri. En la actualidad, en la zona central del banco “falta el altar que se metía debajo del sagrario y que se utilizaba cuando las misas se oficiaban en latín y de espaldas”, hasta el Concilio Vaticano II que se celebró de 1962 a 1965.

Andra Mari de Ugao.

Andra Mari de Ugao.

Y mirando de frente al retablo, el primer piso alberga en su calle izquierda, la imagen de San José y, a la derecha, la de San Antonio de Padua, ambas con el Niño en brazos, coetáneas del retablo “y con un enmarque con orejeras”. En la calle central destaca “la Andra Mari gótica, sin el Niño, en una hornacina de tres pies y un cuarto de fondo y rematada por un arco de medio punto triunfal”. En el centro del ático está la imagen de “Cristo muerto crucificado porque se ve la marca de la lanza de Longino” y en los laterales los escudos de la Corona de Castilla a la izquierda, y de la villa a la derecha.