Tareas habituales en el día a día del baserri que, con el paso del tiempo y a través de apuestas y desafíos, han evolucionado hacia una actividad deportiva de gran dureza, lo que conocemos como herri kirolak. Es la esencia de la exposición Herri Argia. Baserriko lanetik, gaurko kirolari (Trabajo de campo, deporte actual) que se puede ver, hasta el 19 de junio, en la casa de cultura de la localidad arratiana de Igorre. Su autor, el fotógrafo local Gartzen Martínez Sagarna exhibe en esta muestra 24 imágenes, una pequeña selección de las más de 8.000 instantáneas tomadas durante los últimos cinco años documentando competiciones de sokatira, de levantamiento de piedra, fardo y carro, de cortes de tronco con hacha y sierra, además de carreras de txingas y siega. Paralelamente, también organizó sesiones fotográficas con algunas de los y las deportistas que practican estas disciplinas, entre ellos algunos nombres propios de su comarca como Aitzol Atutxa, Irati Astondoa, Pabi Astondoa, Tubi Bustinza o Jon Loiola.

Las fotografías que componen esta exposición fueron sacadas en dos contextos diferentes. Por un lado, están las imágenes tomadas en el transcurso de diferentes competiciones de deportes rurales que tuvieron como escenario frontones, probalekus e, incluso, campo abierto. A esos espacios, Gartzen Martínez se desplazaba únicamente con su cámara y, tomando distintas posiciones durante los eventos, captó las instantáneas con sigilo y sin distorsionar la concentración y el esfuerzo de los deportistas.

Además, durante los cinco años preparando esta colección dedicada a los herri kirolak, también organizó sesiones fotográficas para recrear diferentes modalidades deportivas y en donde las sierras, las cuerdas, los troncos y las piedras talladas adquirieron una función estética. De aquí surge la serie de los retratos de deportistas con sus habituales herramientas de trabajo, unos utensilios que “hace años fueron empleados en trabajos del caserío, en un momento en el que las y los euskaldunes producían una parte importante de sus bienes materiales esenciales”, explica el dossier de la exposición, autoría de la escritora e investigadora mexicana Astrid Villanueva Zaldo que colabora, así, con el personal proyecto del fotógrafo.

Probablemente, el posterior surgimiento de las competiciones fueron un canal de perfeccionamiento de las actividades para el sostenimiento del caserío y un escaparate del mercado laboral ya que, en las plazas de los pueblos, se organizaban reuniones para probar las habilidades de potenciales trabajadores. “Los desafíos, normalmente protagonizados por hombres, habrían cultivado el prestigio y la admiración de quienes mostrasen mayor destreza. Y, quizá, cuando la vida del caserío dejó de ser el sistema dominante de producción de bienes, las puertas de las competiciones se abrieron para nuevos practicantes”.

En la actualidad, el deporte rural vasco tiene tanto a hombres como a mujeres como protagonistas de diferentes y exigentes duelos y pruebas adaptados a una competición deportiva, pero “las herramientas usadas en los deportes rurales nos recuerdan que una vez vincularon a sus portadores con una forma de producción que ha perdido presencia”. Y Gartzen Martínez Sagarna, a través de las instantáneas que exhibe en Igorre, pone en valor que “los movimientos de las hachas, las sierras, las txingas y los fardos continúan produciéndose” y es esta “locomoción humana y mecánica” la que se muestra en Herri Argia. Las personas que acudan a la kultur etxea de Igorre y se detengan a observar las imágenes con detalle podrán apreciar “el equilibrio corporal, las posiciones, los ritmos de levantamientos y de cortes”, como si estuvieran presenciando un campeonato en ese mismo momento.

Además, a través de las imágenes se tiende “un puente entre el pasado, en el que aquellos utensilios generaron bienes esenciales, y el presente, en el que cumplen una función deportiva, gratuita. Es, el movimiento que representan, la huella del desplazamiento de los cuerpos con sus herramientas”, concluye Astrid. En la exposición se podrán ver, también, los versos dedicados por el dimoztarra Ibon Iza a las imágenes. l

‘Herri Argia’

l Colección de 24 fotos. Es la selección realizada para esta exposición por su autor, el fotógrafo local Gartzen Martínez, de entre las más de 8.000 instantáneas tomadas en cinco años.

l Competiciones y sesiones. Parte de las imágenes corresponden con competiciones celebradas en frontones, probalekus o campo abierto y, otra parte, están tomadas en sesiones organizadas por el fotógrafo con diferentes deportistas.

Del caserío al deporte

Evolución de las tareas del baserri a desafíos

Gracias al análisis de la investigadora mexicana Astrid Villanueva se explica el paso de una labor del caseríos a un desafío y, después, a competición deportiva.

Adornado por versos de Ibon Iza

La muestra se completa con los versos compuestos por Ibon Iza, de la localidad de Dima, para esta colección de imágenes.