El Gobierno vasco tiene la intención de asumir de una tacada la construcción y puesta en servicio del trazado de la línea 4 del metro que discurrirá entre la futura nueva estación del Tren de Alta Velocidad (TAV) de Abando y el entorno de Basurto y que recoge las dos nuevas estaciones a construir en los barrios de Irala y Rekalde.

Así lo ha especificado el consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola, en una interpelación parlamentaria por escrito que ha realizado el electo por EH Bildu, Unai Fernández de Betoño. En una de las cuestiones se le pregunta al responsable del Ejecutivo si el proyecto de ejecución de este tramo de la línea 4 que ahora está en redacción recoge la alternativa de poner en marcha solo parcialmente el trazado entre los barrios de Irala y la zona de Basurto “sin tener que esperar a la finalización de la obras en la estación de Abando”.

En su respuesta por escrito, el consejero Arriola indica que la opción planteada “es técnicamente posible” pero que, sin embargo, tendría “unos niveles de calidad de servicio, diseño de línea, frecuencia y tiempos de viaje difícilmente asumibles por la ciudadanía de dichos barrios”.

De esta manera, se deduce, que la intención del Departamento de Transportes es acometer el proyecto constructivo de una sola vez aunque eso signifique que se tenga que esperar a que entre en servicio la nueva estación del Tren de Alta Velocidad de Abando donde concluirá la línea 4 para que sus viajeros puedan hacer trasbordo a las líneas 1 y 2 del metro, las Cercanías de Renfe o los trenes de largo recorrido.

En diciembre pasado Euskal Trenbide Sarea (ETS) –el gestor ferroviario dependiente del Gobierno vasco– adjudicó la redacción del proyecto, con un plazo de ejecución de 15 meses, donde se va a definir el recorrido del metro por la zona sur de Bilbao, con el fin de conectar este entorno con las nuevas zonas a servir de Rekalde e Irala y el centro de Bilbao. Este tramo, de casi tres kilómetros de longitud, cuenta con varias actuaciones singulares, entre las que destacan dos nuevas estaciones soterradas en los populosos barrios de Rekalde e Irala, cada una de ellas con dos accesos.

Fernández de Betoño, en su interpelación también pregunta a Arriola por si el arranque y conclusión de las obras de este tramo inicial de la línea 4 están condicionados a la entrada en servicio de la nueva terminal ferroviaria de Abando. Arriola contesta que “evidentemente su parte final está ligado a la realización de las obras de la estación de Abando”, cuyo proyecto constructivo acaba de ser licitado recientemente.

Sin cronología

Eso sí, indica que “no es posible todavía realizar una cronología de las actuaciones a la vista de las decisiones pendientes de tomar por las administraciones públicas involucradas” como son el gestor ferroviario dependiente del Estado –Adif, Administrador de Infraestructueas Ferroviarias– el propio ejecutivo autonómico, el Ayuntamiento de Bilbao y la Diputación Foral de Bizkaia.

Otra cuestión planteada es saber cuando darán comienzo las obras a lo que el consejero responde que “previamente a las mismas habrá que finalizar las tramitaciones ambientales, obtener la Declaración de Impacto y aprobar el convenio de financiación de dicha infraestructura”, documento este último en el que se implicará el Ayuntamiento de Bilbao aportando financiación como ya hizo con la extensión de la línea 3 del metro por el norte de la villa.

El apunte

Comienzo. Una de las preguntas respondidas por escrito por el consejero Arriola tuvo que ver con el comienzo de las obras, a lo que el socialista respondió que “previamente a las mismas habrá que finalizar las tramitaciones ambientales, obtener la Declaración de Impacto y aprobar el convenio de financiación de dicha infraestructura”, documento este último en el que se implicará el Ayuntamiento aportando financiación como ya hizo con la extensión de la línea 3 por el norte de la villa.