Con 17 años decidió dejar el fútbol y comenzar a correr ya que su compromiso y forma de entender el deporte no coincidía con la de sus compañeros de equipo en Tercera Regional del Elorrio. Menos de un año después de tomar esa decisión, se convirtió en campeón de España de montaña y su palmarés no ha dejado de crecer. Muestra de ello, el elorriarra Gontzal Murgoitio ha cerrado 2022 siendo el mejor del Estado en dos modalidades (línea y distancia clasicc) y a nivel de Euskadi corrió por primera vez a nivel absoluto siendo campeón en cross y en montaña. “Ha sido un año en el que he aprendido mucho. Más que con los resultados, me quedo con la sensación de que he madurado como deportista. Me conozco mucho mejor y he aprendido a competir mejor en las carreras”, valoró.

A sus 21 años, Gontzal corre las pruebas de atletismo con Durango Kirol Taldea y las de montaña lo hace con Salomon, que en la pandemia se interesó por el joven elorriarra viendo su potencial. En la actualidad, es corredor oficial de esta marca que le paga las inscripciones de las carreras y suministra todo el material deportivo necesario. Preguntado por su logros, repasa con madurez todo lo que ha conseguido en poco tiempo. Tras un 2021 donde no obtuvo los resultados esperados, inició 2022 preparándose con ahínco y la clave fue hacerlo sin esa presión de estar entre los mejores. El hecho de ganar el campeonato de España en abril fue una inyección de moral para afrontar con garantías el resto de temporada. “Al segundo le metí cinco minutos y a partir de ese momento fui muy fuerte a las carreras; se notaba que la gente me veía como favorito. En ese momento tenía la sensación de que le podía ganar a cualquiera”.

Una inoportuna sobrecarga en el talón le hizo parar tres semanas poco antes del Mundial de montaña que se disputó a finales de julio en Andorra. El resultado final: un quinto puesto que le supo a poco. “Mentalmente no llegue bien; en la carrera me tropecé con una rama y me di un fuerte golpe en la nariz con un árbol. Ganó el catalán Daniel Castillo al que le saqué cinco minutos en el campeonato de España. Nunca he visto tan cerca un Mundial y me queda esa pena”, aseguró con ganas de quitarse esa espina tras el tercer puesto logrado en Italia en 2021.

Reconociendo que “siempre he sido muy competitivo”, Gontzal recuerda con cariño su primer triunfo en una carrera con nueve años; fue en la prueba popular Joseba Jaka de Durango. Y es que al joven, a pesar de jugar al fútbol, le gustaba tomar parte en diferentes pruebas como la Santxibiri, entre otras. “Mi padre siempre ha corrido y yo también me animaba puntualmente con buenos resultados. Cuando decido dejar el fútbol me preparo para correr el Kilómetro Vertical Anboto, las cosas me salen muy bien y me empieza a picar el gusanillo. También es verdad que siempre he tenido buenos resultados y eso ayuda mucho para estar motivado”, aseguró el atleta.

En la actualidad, Gontzal descansa únicamente los domingos. El resto de días compagina sus estudios de Especialización de Digitalización y Mantenimiento en Eibar con los entrenamientos supervisados por su entrenador personal y también cuenta con nutricionista. “No busco vivir del atletismo, pero si llega la posibilidad bienvenida sea. Tengo que formarme, trabajar, y lo que quiero es disfrutar de este deporte”, aseguró con prudencia.

Con su amigo Oier Ariznabarreta como referente, entrena varios días a la semana junto al durangarra. En este sentido, agradece que “sabe la mentalidad que hay que tener, me pone en mi sitio, me recomiende entrenamientos, carreras y me da consejos”.

De cara a 2023, Gontzal espera revalidar los títulos logrados y confía en poder clasificarse para el Mundial absoluto que se celebrará el próximo mes de junio en Austria. l