EL 1 de enero de 2022 el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia comenzó a prestar los servicios de abastecimiento, saneamiento y control de vertidos industriales en la comarca de Busturialdea. Un consorcio, que al igual que el anterior, es una entidad pública de carácter local supramunicipal.

Busturialdea, núcleo de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, además de comprender una serie de hábitats de gran riqueza ecológica y de estimado e insustituible valor, cuenta con amplias marismas hasta su desembocadura en Mundaka, formando un amplio estuario que conforman extensos arenales; en definitiva, montaña, vegas y marismas, costa y playas. 

Una especial y única ubicación para la que el Consorcio ha dedicado y está dedicando sus equipos de profesionales, recursos económicos, nuevas tecnologías e instrumentos de gestión específicos con el único objetivo de prestar un servicio a sus 16 municipios (Gernika, Bermeo, Forua, Gautegiz Arteaga, Ea, Elantxobe, Ibarrangelu, Mendata, Murueta, Ajangiz, Muxika, Busturia, Sukarrieta, Mundaka, Kortezubi y Arratzu) y 45.000 habitantes que sea homogéneo, eficiente, de calidad y con garantías. Es estratégico para el Consorcio el binomio ciudadanía-medio ambiente, siendo conscientes de que la gestión del agua urbana es un tema clave para la sostenibilidad del planeta y que requiere unos altos estándares de eficiencia y mejora continua.

Para ello, han establecido unas líneas de actuación previstas que se englobaban en tres grandes grupos. El primero de ellos tiene que ver con la adaptación de instalaciones a estándares del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia, al que le sigue la optimización y mejora de infraestructuras y, por último, actuaciones encaminadas al incremento de recurso.

Nuevo servicio Ajangiz. Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia

Problemática inicial

Recordando el día uno de estos once meses trabajando en la comarca, la situación del Consorcio en cuanto a los sistemas de abastecimiento se caracterizó por una doble problemática: la escasez de recursos en los meses estivales, y la imposibilidad de sumar agua al sistema proveniente de acuíferos actualmente no aptos para el consumo. Para solventarlos, las actuaciones adoptadas en estos meses han ido encaminadas en varias direcciones: rastrear y analizar en primer lugar las posibles fugas del sistema y de haberlas, repararlas, sustituir las conducciones en mal estado para asegurar el servicio y tercero, buscar nuevos recursos que aumenten el agua disponible respetando los caudales ecológicos de los ríos.

El PAT (plan de acción territorial de la Reserva de Urdaibai) aprobado en 2020 identificó en 100 l/s las necesidades a completar en la comarca. 

Con ese objetivo, el Consorcio ha ido tomando una serie de decisiones para alcanzar esta cifra como la renovación de la tubería de Golako con un presupuesto de 5,5 millones de euros, la conexión del Sistema Forua-Murueta al Sistema Gernika, nuevas captaciones del sondeo de Ajangiz y un nuevo depósito en Gernika. En total, actuaciones de aproximadamente 10 millones de euros.

Pero a esta hoja de ruta ya programada a comienzos de año, se ha sumado un elemento imprevisto: la ausencia de precipitaciones y las altas temperaturas. 

Desde mayo, mes en el que los recursos hidráulicos de la comarca normalmente se nutren de las lluvias para afrontar el verano, han venido semanas de cero lluvia y mucho calor lo que llevó a que la propia Agencia Vasca del Agua, Ur Agentzia, decretara la situación como “sequía prolongada”. El verano arrancaba en una situación mucho más alejada de ese escenario de recursos suficientes para suministrar el agua necesaria. Era una situación atípica.

El objetivo seguía siendo el mismo: asegurar agua en cantidad y calidad (segura y con todos los controles que la normativa exige) para los residentes habituales, pero también, para las personas que pasan en la comarca sus vacaciones, visitantes, turistas, industrias y actividades económicas de todos los sectores (hostelería, sector primario, servicios).

Se exploraron muchas opciones para garantizar el abastecimiento sin detraer más de lo permitido de los ríos, y con la firme voluntad de no llegar tampoco a restricciones drásticas como los cortes de agua que además de los inconvenientes que conllevan, traen consigo un perjuicio económico, principalmente a la hostelería, el sector servicios, las explotaciones agrícolas y ganaderas y a las conserveras. 

De entre todas, la elegida por ser la más sostenible y factible ha sido la que ha estado en marcha desde principios de agosto consistente en transportar el agua que el sistema necesitaba complementar por medio de un buque cisterna entre el puerto de Santurtzi y Bermeo.

En total han sido 26 viajes y se han transportado 103.470 m³, superando un caudal medio diario suministrado por el barco de 27 l/s. al sistema. Un agua ya potabilizada cuando se llenaban los depósitos y nuevamente tratada antes de su distribución a hogares e industria en la estación de tratamiento de Bermeo y Busturia.

Evidentemente, esta medida se ha sumado a las reparaciones, el mantenimiento y nuevos recursos para que, a todos los efectos, no se haya desabastecido a la población, aportando al sistema de abastecimiento 78 nuevos l/s. 

Es necesario reconocer y agradecer en este punto a los vecinos y vecinas de la comarca así como a todos los Ayuntamientos por su colaboración y compromiso, por haber respetado y actuado haciendo un uso racional del agua conforme a las comunicaciones que se fueron dando a medida que empeoraba la situación.

Las últimas lluvias de finales de septiembre han permitido aliviar la escasez y podemos decir que los niveles de agua en los sistemas de abastecimiento son mejores aunque no óptimos.

Actuaciones que permitan afrontar cualquier escenario futuro

 Firmes en el compromiso con la comarca, el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia sigue trabajando para anticiparse y completar las actuaciones que permitan afrontar cualquier escenario futuro en las mejores condiciones en tanto se complete la conducción que conecte el sistema general de Busturialdea con la red primaria del Sistema Zadorra en la zona de Mungia, que tal y como se recoge en el PAT, en sus 15 km de recorrido, es la solución que garantizará completar las necesidades de abastecimiento de la comarca en los meses en los que sus recursos propios no permitan alcanzar el umbral de los 100 l/s con una inversión de más de 18 millones de euros. 

En ningún caso, por eficiencia y coherencia, se van a dejar de utilizar los ríos, acuíferos y manantiales de la zona pero eso sí, con todas las garantías de respetar sus niveles en los márgenes que la Agencia del Agua indique preservando así la biodiversidad y el ecosistema por el que es reconocida la comarca.

No hay que olvidar, que el mantenimiento es un elemento diferenciador para la seguridad y funcionamiento de las instalaciones quedando concluida para final de año la remodelación del sistema de control y supervisión de la EDAR de Lamiaran, con un presupuesto de adjudicación de 309.548 euros.

El sistema de control de la EDAR de Lamiaran tiene diferentes carencias, en cuanto a instrumentación necesaria para la correcta operación de la planta, automatismos programados para las distintas fases, documentación sobre el funcionamiento de la planta y un SCADA cerrado (software para controlar y supervisar procesos industriales a distancia) que no permite modificaciones ni ampliaciones. Este proyecto contempla solventar todas estas para facilitar la operación. 

Otra importante actuación pone el foco en el sistema de telemedida y telecontrol de la red de saneamiento de Urdaibai, a punto de concluir a finales de año y con un presupuesto de 155.065 euros.  . 

El objeto de este proyecto es el de integrar todas las instalaciones del sistema de saneamiento de Gernika a la EDAR de Lamiaran, una vez finalizada la puesta en marcha del bombeo de Gernika y desmantelada la EDAR de Gernika, para permitir la correcta explotación y mantenimiento remoto de la red de saneamiento desde Lamiaran. Adicionalmente se instalarán medidores en todos los puntos de desbordamiento de la red para medición de los caudales.  

Por su parte, el tandem agua-energía cobra más valor que nunca. “Lo que en alguna ocasión se ha entendido como sistema auxiliar, vemos que impacta e influye en todo el ciclo del agua. El agua no se entiende sin energía, y si los operadores de agua se ocupan de su gestión, debe entenderse también que también gestionan energía. Comprenderlo y preverlo es la única manera de dar un mejor servicio global, con criterios de calidad, garantía y sostenibilidad”, subrayan desde el Consorcio.

Por eso, la entidad aplica principios de sostenibilidad en el desarrollo de toda su actividad, generando energía renovable, reduciendo el consumo energético, reutilizando y valorizando los residuos generados.

A ello añadir que las tecnologías de tratamiento de lodos están en continua evolución favoreciendo la transición de residuo a recurso, tan deseable a nivel de economía circular. El tratamiento y gestión de lodos, el potencial fotovoltaico de las instalaciones e incluso la generación hidráulica en efluentes, puede dar un empujón para mejorar en autoconsumo.