La villa de Ugao-Miraballes recibió la tarde del lunes la triste noticia del fallecimiento, a los 92 años de edad, de José Isasi Arberas, alcalde jeltzale de la localidad durante dos legislaturas: 1983-1987 y 1987-1991. Para el actual primer edil, Ekaitz Mentxaka, se trata de “una grandísima perdida, tanto para la familia de EAJ-PNV como para todo el pueblo”. De su figura humana y política resalta que “es todo un referente, un ejemplo a seguir por su integridad, honestidad y por sus valores, algo que ha calado en mi y que intento llevar a la práctica como servidor público”.
Sobre su gestión al frente del Consistorio ugaotarra, el actual regidor destaca que fue “el culpable, junto al entonces Diputado Foral de Bizkaia, José María Makua, de sacar a Ugao-Miraballes del barro y el lodo tras las inundaciones de 1983”. Y es que, tras 4 años como concejal en la oposición, José Isasi Arbide accedió, en mayo de 1983, al cargo de alcalde de la villa por EAJ-PNV y tan solo 3 meses después de su investidura tuvo que hacer frente a las graves consecuencias de las inundaciones del 26 de agosto de aquel año que, además de importantes y devastadores daños materiales, supuso la pérdida de 3 vidas humanas, las de 3 vecinos que fueron arrastrados por la fuerza de las aguas.
Esa tragedia hizo que los proyectos y compromisos que Isasi y su equipo incluyeran en su programa electoral quedaran relegados porque el principal y gran objetivo tenía que ser la reconstrucción del pueblo. Tanto es así que, tal y como recuerda Mentxaka, “su dedicación y entrega para conseguirlo fue absoluta, hasta el punto que llegó a perder su trabajo”. Y es que, tras meses dedicado en cuerpo y alma a gestionar la tragedia, Isasi tuvo que elegir, en octubre de ese 1983, entre su labor, no remunerada entonces, como regidor o su trabajo. Y se decanto, sin dudarlo, por lo primero, por dedicarse en cuerpo y alma a su pueblo y sus necesidades.
En unas declaraciones efectuadas en 2013 a DEIA, con motivo de la concesión de uno de los premios Hemendik Sariak de aquel año, Isasi recordó especialmente de los días posteriores a las inundaciones “el comportamiento ejemplar de nuestros vecinos y su solidaridad con las personas más afectadas” y puso también en valor el comportamiento de todos sus compañeros de corporación que estuvieron a la altura de las circunstancias. “Aparcaron las diferencias políticas y dieron lo mejor de ellos mismos para sacar el pueblo adelante”, afirmó. Tanto es así que, unos meses después, se reunió con todos ellos, gobierno y oposición, para “felicitarles y darles las gracias por su excelente comportamiento”.
Ugao-Miraballes debe al liderazgo de Isasi, la gestión de su equipo, el apoyo de aquella corporación, y la implicación de administraciones superiores, actuaciones vitales para la reconstrucción de la villa como el proyecto de encauzamiento del río Nervión, que pudo empezar a ser ejecutado en 1987 y que fue financiado al 25% por la Diputación de Bizkaia y al 75% por el Ministerio de Fomento. “Gracias a esa obra faraónica, Ugao-Miraballes no ha vuelto a sufrir inundaciones”, destaca Mentxaka.
Isasi se presentó como candidato de EAJ-PNV a la reelección como alcalde de Ugao-Miraballes en la municipales de 1987 y volvió a tener el apoyo en las urnas de sus convecinos. Fue regidor hasta 1991 y en esa etapa logró otros hitos como la cesión de uso de los terrenos de Arandia para que fuera posible realizar allí el complejo deportivo de campo de fútbol y piscinas y la adquisición del Palacio Jane que luego fue reconvertido en casa de cultura y Centro de Interpretación Histórica.
