Portugalete celebra ya por todo lo alto su fiesta por antonomasia: La Virgen de La Guía. Tras dos años en los que las celebraciones por esta jornada han estado minimizadas por la pandemia, este año La Guía vuelve a celebrarse por todo lo alto viviendo su momento cumbre a las 15.00 horas con la celebración de la tradicional bajada y canto popular en la calle Coscojales, un instante que, sin duda, deja las imágenes más vistosas de la jornada. Así las cosas, la noble villa jarrillera ya celebra una jornada intensa en la que la principal novedad es que tras finalizar la procesión marítima de la Virgen de La Guía, los dantzaris de Berriztasuna Taldea –entidad que organiza esta celebración– bailan a la Virgen una sokadantza en lugar del tradicional aurresku. “El 1 de julio es una de las fechas más importantes para nuestra villa porque el día de Virgen de La Guía es una jornada de reencuentros entre jarrilleros y de vivir y rememorar buenos momentos. Tras dos años de parón por la pandemia, recuperamos esta celebración con toda su intensidad y su programación amplia y variada”, declaró Mikel Torres, alcalde de Portugalete.

De este modo, la fiesta ha comenzado a las 9.00 horas con el tradicional lanzamiento del txupin y el alzado de los dominguines, momento que marca el comienzo de una actividad frenética en el Casco Viejo jarrillero que tendrá su epicentro en la jornada de hoy, pero que, excepcionalmente, también desarrollará algunas actividades el sábado. Así, a lo largo de estos dos días, además de los eventos más tradicionales como la procesión por las calles de Portugalete celebrada a las 10.00 horas y la procesión marítima a las 12.00 horas, los jarrilleros disfrutan de concursos, actividades deportivas, actuaciones musicales y, sobre todo, del placer de volver a reencontrarse y disfrutar. “Esperemos que la gente venga y disfrute de esta jornada tan especial, que se desmelene, pero que lo haga de una forma controlada y que cree en un muy buen ambiente”, indicó Mari Asun Delgado, miembro de Berriztasuna Taldea, un grupo que lleva la friolera de 47 años organizando la fiesta de Virgen de La Guía.

La de hoy es una jornada tan esperada como especial en Portugalete y, por ello, también será necesario adoptar medidas especiales a lo largo de toda la jornada. Por ello, se ha procedido al corte de varias calles al tráfico rodado para que se pueda desarrollar mejor la fiesta. En concreto, se cierran al tráfico parte de las calles María Díaz de Haro y Casilda Iturrizar desde el Puente Colgante en dirección a La Canilla y se cortan las zonas bajas de las calles Correos, Gipuzkoa y General Castaños y la calle Gregorio Uzkiano desde el número 4 al 22. Asimismo, desde un cuarto de hora antes de la bajada de las 15.00 horas, se prohíbe el acceso a la calle Coscojales a cualquier persona desde la plaza de La Ranchería y las calles Víctor Chávarri y Casilda Iturrizar.

Por otra parte, Portugalete también ha establecido un servicio especial de limpieza y un dispositivo de seguridad. De esta manera, a lo largo de todo el día trabajarán un total de 47 operarios de limpieza para tratar de mantener en todo momento la villa lo más limpia posible. Por su parte, medio centenar de efectivos de la Policía y los Vigilantes de Ordenanzas velarán porque todo se desarrolle dentro de los cauces normales. A este despliegue de seguridad habrá que añadirle el operativo especial que establecerá la Ertzaintza. Como ya ocurriera en otras fiestas jarrilleras, las mujeres contarán con un puesto de atención especial en el caso de sufrir algún tipo de agresión sexista. Dicho puesto se encuentra en la parte baja del antiguo mercado de abastos, un puesto que ojalá no tenga actividad a lo largo de esta jornada festiva en la que, como el resto de días del año, no seguirá siendo no.

En corto

Más de 50.000 personas. La fiesta de la Virgen de La Guía suele citar en Portugalete a cerca de 50.000 personas, una cifra que es posible que se supere este año al caer en viernes y llegar tras dos años de parón por la pandemia.

En transporte público. Se aconseja a quienes se desplacen a Portugalete desde fuera de la noble villa que lo hagan en transporte público y dejen el coche en casa. Portugalete tiene metro, tren de Renfe, líneas de autobús y el Puente Colgante.