La sociedad foral vizcaína Seed Capital lanzó en marzo de 2019 Crowdfunding Bizkaia, la primera plataforma de micromecenazgo fomentada por una administración pública. A día de hoy, tres años después, pueden alardear de haber respaldado hasta ocho proyectos innovadores de forma exitosa, obteniendo para ellos, en total, 700.000 euros.

Crowdfunding Bizkaia buscaba convertirse en una alternativa de financiación para proyectos innovadores locales y así ha sido para Fazil, Osteophoenix o Nahiarte, entre otras, que representan no solo el “éxito” de los proyectos de forma individual, también la variedad en la innovación local. Ainara Basurko, diputada vizcaina de Promoción Económica, así lo ha atestiguado: “Este sistema nació con el objetivo de complementar y fortalecer el ecosistema innovador de Bizkaia, con proyectos de tipo tecnológico o social. La plataforma sigue creciendo como instrumento de financiación para startups con 750 personas inscritas y más de 190 inversiones, desde los 30 euros hasta los 10.000 por ticket”, ha indicado Basurko.

INNOVADORES

Ignacio Santos es uno de los jóvenes que impulsó Fazil, un “neobanco” alternativo a los “grandes edificios y los banqueros con corbatas”. “La diferencia principal desde el punto de vista de la banca es la perspectiva generacional. Escuchamos a los jóvenes”, ha expuesto Santos. Este banco impulsado gracias a Crowdfunding Bizkaia apuesta por la tarjeta virtual y “la conexión con la generación Z”. Fazil consiguió los 160.000 euros que requerían en una hora y en 24 horas llegaron a 185.000. “Un hito no solo por lo económico, también por la validación social de un banco nuevo”, ha razonado Santos.

Nahiarte es un proyecto dirigido al despliegue total de la potencia creadora de personas con discapacidad psíquica y/o intelectual. Pidieron 50.000 euros, pero cerraron en 51.700. “Sentimos mucha gratitud, porque en nuestro caso el apoyo es altruista; los inversores no recibirán rentabilidad”, ha comentado Ana Urgoiti como fundadora del proyecto.

“Necesitábamos una tienda física en Bilbao y un taller de trabajo para lograr la salida laboral de nuestras artistas. El apoyo de Crowdfunding Bizkaia ha sido increíble. Nos asesoraron en el plano financiero, comercial y de imagen. Con ese respaldo lanzarnos a ello fue mucho más fácil”, ha señalado Urgoiti.

Con una pandemia de por medio, lo lograron. Con un confinamiento y buscando el altruismo, pero lo lograron. “Fue una montaña de emociones. Recibíamos llamadas de ánimo por parte del equipo de Crowdfunding Bizkaia incluso durante el confinamiento”, ha revelado la fundadora de Nahiarte.

Para lograr que Osteophoenix “saliera al mercado americano”, Ángela Lizarazo y su equipo solicitaron 50.000 euros. Consiguieron 60.000. “Es complicado encontrar financiación por la complejidad del producto que ofrecemos, pero encontramos esta plataforma”, ha explicado, agradecida, Lizarazo.

Osteophoenix ha desarrollado dos líneas de trabajo, según ha comentado Lizarazo. Por un lado, reconstruyen partes del cuerpo “del cuello para arriba”. Por otro lado, apuestan por la regeneración ósea. “Aplicamos la tecnología a la salud de las personas que han sufrido accidentes”, ha finalizado la emprendedora.

Óscar Ugarte, director de Seed Capital, ha reflexionado sobre el papel de Crowdfunding Bizkaia: “Es un canal que consigue no solo financiación, sino también sinergias y socios para el proyecto. Es, además, un escaparate en el mundo online”. “Aportamos un elemento de valor incalculable: la confianza”, ha subrayado. Confianza con la que han contado Ignacio Santos, Ana Urgoiti y Ángela Lizarazo, pero también otros cinco proyectos innovadores que refuerzan la “democratización” de la innovación en Bizkaia