El programa Goihabe de integración de refugiados atiende en Bizkaia a 140 personas al año, según los datos del balance de evaluación de la iniciativa puesta en marcha por la Diputación en abril de 2016. La iniciativa "pionera", según ha recordado la diputada de Empleo, Inclusión Social e Igualdad, Teresa Laespada al presentar el informe, supone un "grano de arena" en la atención y acogida de las personas que llegan a Bizkaia huyendo de la guerra, las violaciones de derechos humanos o de la violencia. "Nadie deja su país ni abandona a su familia si no existen poderosas razones para ello", ha destacado en las Juntas Generales.

El programa se puso en marcha en respuesta a la crisis de refugiados que se produjo en Europa en 2015, cuando más de un millón de personas llegaron a sus costas huyendo principalmente de la persecución y la guerra en Siria, Afganistán e Irak. De forma "pionera" y complementaria a la labor de acogida e integración que corresponde al Gobierno español, desde la Diputación se diseñó una estrategia para atender a los refugiados o solicitantes de asilo que pudieran llegar al territorio vizcaino. De forma similar a lo que ocurrió a nivel europeo, las 80 solicitudes de protección internacional del año 2014 se duplicaron en un año en Bizkaia, y se multiplicaron por seis hasta alcanzar el medio millar en 2016. Laespada ha criticado que, a marzo de 2018, el Estado español apenas había reubicado en su territorio al 15,4% de la cuota de refugiados a la que se había comprometido. "La vergüenza es importante", ha lamentado.

Goihabe se dirige a las personas que se han beneficiado del programa de acogida temporal del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. "Se producía un salto al vacío cuando las personas terminaban esa fase, se soltaban los apoyos y ellos todavía seguían necesitando acompañamiento", ha relatado Laespada. A través de cuatro entidades (Cear-Euskadi, Cáritas, Cruz Roja y la Fundación Social Ignacio Ellacuría), este programa "novedoso, polivalente y multidisciplinar" ofrece intervención a las personas refugiadas -o solicitantes de asilo, incluso si este les ha sido denegado- en ámbitos como la intervención social, el apoyo sociolingüístico, la vivienda, la asistencia jurídica o los planes formativos y laborales. Anualmente se ha atendido a cerca de 140 personas: cincuenta mujeres, cuarenta unidades familiares y 35 jóvenes. Dos de los autores del informe, Encarnación La Spina y Gorka Urrutia, han explicado los resultados del informe, destacando entre sus fortalezas su flexibilidad y transversalidad, el apoyo que representa para los casos más vulnerables (por ejemplo para aquellas personas a las que se les ha denegado la solicitud de asilo) y los espacios de coordinación que ha generado entre las entidades conveniadas.

Desde la oposición, aunque han valorado positivamente este programa, tanto Izaskun Duque (EH Bildu) como Israel Escalante (Elkarrekin Bizkaia) han planteado que las partidas económicas de cada ejercicio puedan ser superiores, habida cuenta de que el número de solicitudes de asilo se ha incrementado y que dichas cuantías se suelen ampliar a lo largo del año. Laespada ha puntualizado que las partidas económicas se van adaptando a las necesidades de cada ejercicio presupuestario, ya que también existen otras instituciones que prestan esta atención y que, pese a no aparecer en el plan de legislatura Bizkaia Egiten, este programa sigue siendo "estratégico" para la Diputación.