Cada uno aporta lo mejor de sí mismo para configurar un todo espléndido: su voz, sus viñedos, sus manos, sus piernas, su vocación... Cada granito de generosidad confecciona una comarca de valores, éxitos, tenacidad, pasiones y esfuerzo. Las melodías de Ekidazu Abesbatza, el txakoli de la Bodega Magalarte Zamudio, la fuerza que tira y tira de Goiherri Kirol Elkartea, o el arte al que da forma Jon Alberdi; la incansable potencia de Astrabudua Taldea o del club Uritarra, o toda una vida de medicina para Isabel González y Jon Viguera. Son solo algunos ejemplos de la grandeza de una comarca como Txorierri. La ermita de La Cruz, en Lezama, fue ayer un reflejo de la calidad humana y profesional de estos municipios al acoger la gala de los XI Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak, que repartió 14 merecidos premios en total a vecinos, asociaciones, clubes y empresas de pedigrí.

Ya lo destacó Iñaki González, director adjunto de DEIA. Ellos son los protagonistas, los que hacen “cultura, deporte, municipio y país, en definitiva, desde el compromiso y más allá de los grandes titulares”. El alcalde de Lezama, Jon Ander Aurrekoetxea, que abrió con cariño las puertas de la localidad que gobierna, tuvo bonitas palabras para los premiados. “Gracias por vuestro esfuerzo, hacéis que disfrutemos de actividades muy distintas, ayudáis a los más desfavorecidos desde el anonimato y las empresas creáis puestos de trabajo, que son ocupados, en muchas ocasiones, por nuestros vecinos”. Precisamente, dos personas muy queridas en Lezama se alzaron con el Omenaldi Saria, un galardón empapado en sentimiento. Isabel González y Jon Viguera acaban de colgar la bata de la medicina tras 37 y 29 años ejerciendo como médico y practicante del municipio, respectivamente. Ellos aportaron unas de las dosis más graciosas de la gala. “Da pena después de tantos años, pero también había ganas de descansar, ¿eh?”, reconoció Isabel. “Bueno, ya seguiremos pasando consultas por el pueblo, yo he pasado ya muchas en los semáforos”, afirmó Jon. El pasado domingo, casi 150 personas les prepararon una sorpresa de despedida. Eso ya lo dice todo respecto a lo que significan para su municipio. También de Lezama es Ekidazu Abesbatza, que desde hace más de quince años es la banda sonora de las celebraciones de su municipio y de los alrededores.

Otro de los momentos más especiales llegó cuando los representantes de Goiherri Kirol Taldea subieron al escenario para recoger su Bizkaia Saria, un premio que engordará sus nutridas vitrinas. “Nuestro objetivo principal para el año que viene es el campeonato de Euskadi y luego ya se verá”, comentaron los representantes del club.

Hay muchos campeones en esta comarca. Como lo es Rubén Glera. Hace apenas unos meses se proclamó campeón de Europa de UItramaratón en Mountain Bike. Desde Zamudio, a las alturas. Fueron más de 200 kilómetros de carrera en la que hubo un desnivel superior a los 6.000 metros. Más de doce horas de titánico esfuerzo bien merecieron el aplauso que sonó en la ermita de La Cruz. “El ciclismo, y especialmente, el de montaña, te da libertad, te permite estar en contacto con la naturaleza, ver sitios...”, alabó.

Otro txapeldun es Urtzi González. Tiene 15 años y aunque sufre una parálisis cerebral que le obliga a ir en silla de ruedas participa en todas las carreras que puede, gracias a los chicos de Astrabudua Taldea. Ayer, el joven estuvo en la gala. Este club de atletismo y también de triatlón, ciclismo y montaña representa la máxima generosidad. “Urtzi se ha empeñado en correr con nosotros y le acompañamos a todo lo que podemos”, comentó con ternura Txema Negro. Otra de las huellas de Erandio en los XI Laboral Kutxa DEIA Hemendik Sariak la dejó Jon Alberdi y no una marca cualquiera, sino una creativa. Su taller de forja artística en la localidad aporta ese toque único. “Mi gratitud y sentimiento a los mineros, a Altos Hornos... a todos los que han trabajado el hierro, que es el material que más se ha mimetizado. Hay cientos de miles de objetos hechos con hierro”, incidió.

Y de empresas de calidad también puede presumir Txorierri. Vaya que sí: Indupime y Contratas Medrano son buena muestra de ello. Por eso, por el gran trabajo que hacen por la comarca, fueron distinguidos ayer. “Yo no tengo clientes, tengo amigos, así que eso quiere decir que quedan satisfechos con el trabajo”, señaló Javier Medrano. Precisamente nivel es lo que garantiza el Colegio Ayalde, una referencia educacional desde Loiu. Lo mismo ocurre con Bodega Magalarte Zamudio en el ámbito vinícola y con el restaurante Aspaldiko, en el gastronómico. Otro de los nombres propios de la noche fue el de Izaskun Llona, una de las galardonadas más emocionadas. Y es que este año ha dejado Gorain-tzaleak Dantza Taldea. Más nombres engrandecieron la ceremonia: José Ramón Taranco, Alaitz Etxeandia, Aritza Antolínez, Gorka Carro, Mireia Zarate, José Luis Bilbao, Idoia Bilbao, Juanvi Baeza... Por parte de DEIA acudieron Kike Hermosilla, Josu Molinos, Iñigo Aspiunza, Joana Pérez y Oier Pérez.