Bilbao - La Diputación descarta habilitar un segundo comedero para aves carroñeras en Bizkaia, como complemento al que ya existe en Karrantza. La responsable del departamento de Sostenibilidad y Medio Natural, Elena Unzueta, desligó los avistamientos de buitres leonados que se producen en zonas urbanas, como el aeropuerto, con el hecho de que, durante dos meses, no se haya podido llevar comida al muladar. “Estamos viendo estas aves en zonas urbanas, no porque no haya aporte de comida, sino por razones que ni siquiera los expertos pueden especificar”, explicó la diputada foral.
Unzueta compareció ayer ante las Juntas Generales, a petición del apoderado del Grupo Mixto, Arturo Aldecoa, para explicar por qué, entre enero y mayo, la aportación al muladar de Karrantza ha disminuido en un 38%. Aldecoa advirtió de que un desabastecimiento del comedero conllevaría “la necesidad de las aves necrófagas de desplazarse en busca de alimento”, con el riesgo que ello conlleva si se acercan a zonas sensibles para el aeropuerto.
La diputada explicó que las intensas lluvias y nevadas del invierno causaron daños en la pista que lleva al muladar, que impidieron el acceso al vehículo que transporta la comida -400 kilos a la semana en verano y 200 en invierno-, así como su reparación. El 20 de abril, el camino pudo ser abierto de nuevo y el suministro se reanudó “con normalidad” tras un episodio que calificó de “fortuito. Nuestra compromiso es seguir con el aporte de comida a ese muladar”.
El departamento está en contacto con la dirección del aeropuerto, a través del comité de fauna, para abordar la situación de los avistamientos de aves en el aeródromo. La última reunión se celebró el 31 de mayo, el mismo mes en que un buitre leonado fue succionado por la turbina de un avión que iba a aterrizar en Loiu, y está prevista un nuevo encuentro en septiembre. Según les comunicaron desde Aena, la presencia de aves en los entornos de los aeropuertos es un “problema general”, aunque la situación en Bizkaia “no es la más preocupante”. De hecho, la empresa pública que gestiona los aeropuertos tiene previsto convocar un foro con todos los aeródromos del norte de la península para tratar de evitar que los buitres se acerquen a los entornos de esas infraestructuras y creen situaciones de peligro. En este sentido, y tras descartar un segundo muladar en Bizkaia, ya que “con el que existe es suficiente”, avanzó que Aena está en contacto con territorios y comunidades limítrofes para ver la posibilidad de abrir otro comedero “y diversificar” las zonas de abastecimiento.
Unzueta también relató que, en una de las reuniones mantenidas con la dirección del aeropuerto, desde esta se les trasladó la preocupación ante la posibilidad de llevar residuos urbanos al vertedero de Mallabia, “ya que supondría un problema gravísimo en la zona de entrada para el aterrizaje de los aviones”.