DURANGO - Las previsiones meteorológicas avisaban de que Durangaldea se teñiría de blanco ayer y así fue. Las impresionantes estampas hicieron las delicias de numerosas personas que fotografiaron los paisajes teñidos de blanco pero también ocasionaron cuantiosos problemas para poder circular por las carreteras de la comarca. Además, el trasporte público también sufrió suspensiones por la mañana. Euskotren tuvo que suspender el servicio sobre las 8.30 horas con numerosos viajeros a medio camino de su trabajo teniendo que volverse a casa. “Parece mentira. No estamos preparados para la nieve porque caen cuatro copos y aquí se para todo”, explicó indignada Laura Talavera, que guardaba cola en la estación para recuperar el dinero de su billete.
El servicio ferroviario recuperó la normalidad a media mañana y esta situación también se dio con Bizkaibus que suspendió el servicio en toda Bizkaia durante buena parte de la mañana para recuperarlo sobre las 12.00 horas. Por otro lado, el servicio de OTA en Durango contó con la presencia de sus trabajadores “pero hoy no se multa”, aseguraron desde la oficina de información.
Como suele ocurrir en estos casos, los escolares fueron los que más disfrutaron de la copiosa nevada. Y es que algunos centros educativos, aunque los profesores acudieron a las instalaciones, recomendaron no llevar a los niños a clase. “Los más felices son ellos que están sin colegio y pasándoselo de diez en la calle”, explicó entre risas Jorge, padre de dos niños que correteaban por la nieve
Los distintos barrios de municipios de Durangaldea fueron los que más sufrieron las consecuencias del temporal. Fue el caso de Idoia Arizmendiarrieta, vecina de Oromiño, que no pudo acudir a su puesto de trabajo ya que los veinte centímetros de nieve caídos en el barrio iurretara impedían desplazarse en coche. “Por nuestro barrio no pasa la quitanieves y hoy me he tenido que quedar en casa”. - K. Doyle