La casa de cultura de Berriz se vistió ayer de gala, y es que la ocasión bien lo merecía. El recinto albergó la novena edición de entrega de los DEIA Hemendik Sariak con el objetivo de reconocer las acciones emprendidas y desarrolladas por las personas anónimas, asociaciones y entidades del entorno que permiten que Durangaldea continúe creciendo día a día.
Las primeras palabras corrieron a cargo del alcalde del municipio anfitrión, Orlan Isoird, quién reconoció que “nos suele costar agradecer el trabajo que realizan muchas entidades y ocasiones como estas son muy importantes para mostrar nuestro agradecimiento”. En la misma línea, Bingen Zupiria, director de DEIA, destacó también la relevancia que tiene para este periódico “la información de las personas y sus historias”.
El primer galardonado fue la Ikastola Lauaxeta de Amorebieta que se ha convertido en uno de los grandes referentes de la comarca. La directora, Mari Tere Ojanguren, aseguró que “hemos recibido numerosos premios pero este de DEIA es todo un honor recogerlo”. Sobre ruedas marchaba la gala y en esas le llegó el turno para Gurutze Frades. A sus 35 años, la iurretarra se ha convertido en una de las referentes vascas de la nueva era del triatlón. Tras vivir la experiencia del Ironman de Hawai el pasado mes de octubre, la mujer de hierro aseguró que “ayer empecé la temporada de 2017 con el objetivo del de volver a Hawai”.
Como viene siendo habitual, los DEIA Hemendik Sariak tampoco se olvidaron del comercio local. Así, Muebles Gandarias de Durango recibió el tradicional Merkataritza Saria tras 69 años dedicándose al mundo del mueble y la decoración.
En el apartado social destacaron los voluntarios de Cruz Roja, la Asociación para la Integración de Discapacitados de Amorebieta (Aidae) y Uztarri Kultur Taldea por llevar diez años impartiendo clases de euskera en Amorebieta a jóvenes inmigrantes o vecinos con padres que no conocen el idioma. Miren Dobaran, de este último grupo, quiso acordarse del anterior presidente Txomin Aurrekoetxea y sobre todo “de las familias que confían en nosotros”.
Y de lo más social a la cultura con mayúsculas. Reconocimiento para los Centros Andaluz, Extremeño y Palentino Castellano-Leonés de Durango. También se premió el quincuagésimo aniversario de Udabarri Dantza Taldea y el cuarto de siglo de Mikel Deuna Dantza Taldea. La entidad iurretarra, con Olatz Plazaola a la cabeza, se mostró satisfecha porque “somos una treintena de integrantes pero contamos con una veintena de jóvenes desde el año pasado y ellos serán nuestros sustitutos”.
El Omenaldi Saria fue para el obispo y misionero Bittor Garaigordobil que acaba de celebrar su 101 cumpleaños. El reconocimiento fue recogido por el sacerdote Joseba Legarza quien aseguró que “Bittor vive feliz”. En lo que a los premios berriztarras se refiere, los hermanos Biritxinaga lo recibieron por el trabajo en su explotación Aiarbi S. L. y Berrizko Merkatari Elkartea por trabajar día a día por impulsar el comercio local. En la gala estuvieron también presentes personas conocidas de la comarca como Mari José Balier, Iñaki Gil, Manu Castilla, Itxaso Garamendi o Iñaki Alonso. Acompañando a los premiados de Durangaldea estuvieron en representación de DEIA Kike Hermosilla, Carlos Basterretxea, Itziar Leal, Ana Rementeria, Iñigo Aspiunza y Joana Pérez.