Abanto Zierbena - La vespa velutina, comúnmente conocida como avispa asiática, continúa inexorable su expansión en Euskadi. Desde que fuera detectada en 2010 en Irun, esta avispa ha ido paulatinamente ganando terreno y en las últimas semanas se ha detectado una importante colonia de nidos en Meatzaldea, donde los apicultores han dado la voz de alarma. “Son tremendamente voraces y atacan de manera sistemática las colmenas hasta que las destruyen”, relata Carmelo Guzmán, una apicultor aficionado del barrio de Abanto que ha visto cómo en el último mes se ha quedado sin uno de los siete panales que posee en una campa del municipio de Abanto-Zierbena.

“Yo he llamado dos veces a la Diputación Foral y los bomberos han venido a retirar los nidos, pero tiene que haber muchos más desperdigados por el municipio y por el entorno porque hay miles de avispas” , reseña Carmelo, quien este mes ha eliminado más de 3.000 avispas con trampas y la ayuda de un cazamariposas.

La avispa asiática, que alcanza los tres centímetros de larga -casi el doble de la avispa común- supone una amenaza al equilibrio del ecosistema, ya que es una especie invasora que afecta gravemente a la población de abeja común. La avispa asiática es un predador de las abejas y éstas son imprescindibles para asegurar la polinización de las plantas y frutales. “Las cogen al vuelo y las llevan a los árboles donde se las comen“, comenta Carmelo, quien en más de una ocasión ha “cazado” a las avispas con la abeja entre sus afilados dientes.

Todos los indicios apuntan a que la vespa velutina proviene de Asia y entró en Europa a finales de 2004, al parecer en un contenedor importado de China. “Yo he detectado tres nidos: uno en San Pedro de Abanto, otro en el barrio Cadegal de Ortuella y el último que retiraron ayer -por el lunes- en un pino que hay junto al busto de la Pasionaria en Gallarta, pero tiene que haber muchos más nidos en la zona y los apicultores no podemos encontrarlos sin ayuda”, señala Carmelo, quien sentencia que si las instituciones no hacen algo mal respecto “nos vamos a quedar sin abejas y si ellas desaparecen desapareceremos todos”. - L. Benito