Txabariex mueve la fiesta a ritmo de habanera

Balmaseda- Último ensayo antes del concierto estrella de las fiestas de El Carmen. Más de cien personas se dan cita en la kultur etxea y acompañan las habaneras que la charanga Txabariex entonará esta noche desde las 22.00 horas en la plaza de San Severino, como ha sucedido en los últimos 18 años. Así es Balmaseda. Una villa “cantarina y comediante” que presume de apego a sus tradiciones, según catalogan los veteranos del grupo: Marisol Reina, José Ramón Álvarez, Fabián Montes, Juan Antonio Vitorica y Txipu, a quienes se ha unido Cipri Onita, de origen rumano, que se ha integrado a la perfección.

No sabrían precisar de dónde procede la inclinación de Balmaseda por las habaneras, “quizás de los vecinos que emigraron a América tras la Guerra Civil?”, elucubran. En cualquier caso, las historias de amor y desamor que trasladan estos temas han triunfado hasta convertirse en un acontecimiento imprescindible, más que un clásico del programa. Hoy, además, rinden homenaje a José Manuel Fernández, uno de los fundadores del concierto, fallecido hace una década, abriendo la actuación con una pieza compuesta en su honor e incluyendo fotografías suyas en el cartel anunciador. Es la novedad que siempre regalan.

El nombre Txabariex proviene de la Charanga Balmasedana del Rioja Express que puso en marcha en 1978 una cuadrilla con ganas de divertirse en los años de despertar tras la dictadura. Familias enteras salían a la calle para exprimir las fiestas redescubiertas. “Cantábamos, desfilábamos por la calle, nos disfrazábamos? lo pasábamos estupendamente”, rememoran. Transcurrieron los años y algunos componentes de Txabariex se sumaron a un evento musical organizado en el pórtico de la catedral de Santiago en la Aste Nagusia de Bilbao “del que acabaría surgiendo el pub Ibiltaria promovido por el grupo Oskorri”. ¿Por qué no trasladar esa misma filosofía a Balmaseda, que los asistentes participen activamente entonando temas relacionados con la villa? De esta forma nació el concierto de habaneras. Miembros de la coral Kolitza o la banda musical de las Encartaciones, Azkoaga, se unieron para subir la idea al escenario.

Cuatro discos Aunque empezaron con las piezas más conocidas para romper el hielo y animar al público a dejarse atrapar por la música, con el tiempo han ampliado el repertorio hasta las 89 habaneras que figuran en su registro particular, muchas compuestas por autores de Balmaseda. 72 de ellas forman parte de los cuatro discos grabados en directo durante los conciertos “con el fin de divulgar estas canciones”. Han seleccionado con antelación las 19 que sonarán para meterse de lleno en los ensayos dos meses antes del gran día. A principios de junio se acoplan a los once instrumentos las voces de un centenar de personas que año tras año abarrotan el auditorio principal de la kultur etxea. “Hay quien se queda de pie porque no hay sitio”, cuentan. Ellos darán pie a un coro mayor hoy en la plaza de San Severino.