UNA de las contadísimas ikastolas que hablan, leen y crecen en euskera fuera de las mugas de Euskal Herria hace un llamamiento solidario al pueblo vasco. Es la Boiseko Ikastola, con actividad ilusionante en Estados Unidos. A través de María Fernández Pardo, una andereño y logopeda de 25 años -uno menos que la ikastola- de Abadiño, solicitan la donación de ropa de baserritarra infantil que les sirva para celebrar fiestas como Santa Águeda, tamborradas, carnavales, Olentzero... Ella se puso en contacto con otro vecino de la anteiglesia, Ander Cimas, encargado de la agencia de viajes Bagoaz Bidaiak y a día de hoy ya cuentan con una media docena de trajes de baseritarra infantiles para enviar al centro euskaldun del país norteamericano.

María se incorporó a la ikastola tras acabar su segunda carrera y ver que las cosas no pintaban bien en Euskal Herria. Estaba en Irlanda. Envió el currículo para una plaza vacante a Boiseko Ikastola y fue suya. Al llegar al lugar, aunque ya le habían prevenido, aquella no era una ikastola como las de Euskal Herria. "Ni mejor ni peor", matiza a DEIA la andereño desde Estados Unidos. "Esto es una especie de haurreskola para niños y niñas de entre 2 y 6 años, donde tratamos de transmitirles esa identidad vasca que tanto nosotros como generalmente sus padres o abuelos tienen", contextualiza la vizcaina.

Fernández llegó el pasado noviembre y a principios de diciembre comenzaron a preparar los actos de Navidad. El alumnado estaba intrigado por conocer y celebrar por primera vez el día mágico de Olentzero. "Muchos no entendían muy bien quién era ese hombre. Cuando recibimos a Olentzero en la ikastola, los niños estaban muy emocionados, y a decir verdad, yo también un poco por vivir eso a tantos kilómetros de casa", valora María. En ese momento vio que actos como este u otros del calendario anual podrían ser más genuinos si el alumnado vistiera ropa de baserritarra, autóctona de la Euskal Herria madre. "Con Olentzero, yo eché en falta ver a todos los niños vestidos de baserritarras como pasa en Euskadi en cualquier escuela. Lo mismo me pasó cuando nos estábamos preparando para Santa Águeda". Por ello, la joven de Abadiño tomó la iniciativa solidaria tras consultárselo a la directoria del centro. "Ella me dijo que la idea era muy buena, pero que la ikastola no contaba con presupuesto para comprar tal cantidad de trajes, así que yo le dije que preguntaría a familiares y amigos para ver qué se podía hacer, ya que en cada casa suele haber un traje de aldeano olvidado en algún armario", comunica. Contactó con Ander Cimas, de Bagoaz Bidaiak, y juntos ya han conseguido las primeras entregas en la agencia ubicada en el barrio de Traña-Matiena, de Abadiño. Las personas interesadas en aportar ropa infantil de estas características también pueden ponerse en contacto en el correo info@bagoaz.com. De los costes de envío se encargará la ikastola.

diáspora vasca Ander Cimas hizo el contacto con este centro educativo gracias a unos clientes de su agencia que le solicitaron el viaje a la ciudad. La presencia vasca en Idaho es de las mayores y más activas de nuestra diáspora. "Me hizo mucha ilusión cuando me propusieron esta colaboración. Lo cierto es que se habla mucho del contacto con Boise, pero a la hora de la verdad iniciativas como esta cuestan que se cumplan. Esperamos que esta vez sí pueda ser", comenta Cimas.

La presencia vasca, sobre todo de ascendencia vizcaina, es "bastante grande" -valora María- en Boise y por extensión Idaho. Aquellas personas que de Euskal Herria emigraron y se asentaron en el enclave no quisieron perder su identidad y lucharon por ello. "Gracias a ello cuenta con un museo vasco, del que dependemos; centro vasco, en el que se celebran la mayoría de eventos de la comunidad, aparte de negocios propios en el mismo Basque Block".

Además, la ciudad cuenta con grupos de danzas vascas, de trikitixa, pala, clases de euskera de distintos niveles en el museo, personas que se reúnen para jugar a mus? "Siempre hay algo en marcha, actividades, eventos, como San Ignacio cada año, y el gran Jaialdi que se celebra cada cinco años y que nos toca el próximo 2015", avanza Fernández. La Universidad Estatal de Boise cuenta además con un Centro de Estudios Vascos. "¡Es una comunidad bastante consolidada!", confirma.

María Fernández quiere matizar que los grupos de danza son "totalmente aparte de la ikastola, y están formados por niños de diferentes edades. Estos grupos tienen sus trajes y su calzado? pero no todos los niños de la ikastola asisten a esos grupos de danza. Es por eso que lo que yo me propongo es conseguir trajes para que se queden en la ikastola, y que los niños que asisten a ella usen año tras año en los diferentes eventos", incide. Y va más allá: "No vamos a crear un grupo de danzas en la ikastola; es para actos del año".

El centro es una escuela pequeña que cuenta con 26 alumnos matriculados en este momento. En ella trabaja la directora, Mara Davis, americana de orígenes vascos; Oihana Andion de Iruñea, pero afincada en Boise, y María Fernández, "que soy la andereño principal por así decirlo".