La leyenda, que en ocasiones se inyecta el suero de la verdad, habla de que Frank Sinatra acabó sus días con un tabique nasal de platino. Claro que la leyenda del crooner es todo un entramado de luces y sombras que van desde el propio puente metálico, provocado por sus desvaríos con la cocaína, a sus excesos y gamberradas con el Rat Pack. Conviene detenerse aquí, en aquel extraño grupo de los años cincuenta y sesenta al que, según se dice, la mismísima Lauren Bacall (Den Mother o Madre Gallina en el argot canalla que empleaban...) bautizó tras una noche de alcohol en Las Vegas. "Parecéis una maldita pandilla de ratas" ("You look like a goddamn rat pack"), dicen que dijo, refiriéndose a la apariencia de cansancio de los miembros del grupo. Es de sobra conocido que el propio Sinatra, Humphrey Bogart, Dean Martin, Sammy Davis Jr., Peter Lawford y Joey Bishop, entre otros, quemaron mil y una noches entre los años cincuenta y sesenta.
En la historia que hoy nos ocupa también aparecen narices metálicas -hablamos del certamen de la zona norte, clasificatorio para la final de la XXI Nariz de Oro, donde se elige al mejor sumiller del Estado, siempre en busca del rey de los rastreadores...- y gente que bebe, aunque lo haga con son pausado y experto, con ajustada moderación. El desenlace de una jornada cargada de suspense dictaminó que Elías Rodero, de La Vinosfera; Arnau Estader, de Anima Ardotegia de Zarautz; Jon Andoni Rementeria, del restaurante Remenetxe; Olalla Elorriaga, sumiller de La Granja Selección; Roberto Monreal, del restaurante Baserri; Iban Mate, del restaurante Dolarea; Félix Millar, Álvaro Tobalina, del restaurante Andere; Mónica Castillo, del restaurante Oleaga e Iban Martín, todos ellos superdotados para el arte de leer entre copas de vino.
En un acto celebrado en el hotel Domine Bilbao donde participaron 48 sumilleres, encargados de identificar más de 40 vinos y destilados, la fiesta del vino cogió cuerpo. No en vano, vino y gastronomía se hermanaron con una serie de conferencias impartidas por reconocidos enólogos -Elena Adell, de Bodegas Azpilicueta, es un vivo ejemplo...- se vivió la experiencia Nariz de Oro Experimenta donde se impartieron talleres de elaboración de tapas de alta restauración, cócteles superpremium y clases de corte de jamón. La Nariz de Oro de 2009, María José Vázquez, sumiller del Guggenheim; Alex Candina, Luis Fernández y Amador Mediavilla, con su Paternina 08, Erika Vasquez, Ezequiel Martín, Jean Antonio Marcos, José Ramón Calvo, Miren Yubero o Luis Mari García, entre otros, vivieron una tarde marcada por la emoción.
