El Bilbao Arena se prepara para uno de los momentos más emotivos de la temporada. El próximo 14 de diciembre, durante el descanso del partido entre el Surne Bilbao y Hiopos Lleida, miles de peluches nuevos volverán a volar sobre las gradas en la séptima edición de la ya clásica “lluvia de peluches”, una acción solidaria destinada a llevar ilusión navideña a niños y niñas en situación vulnerable.
La mecánica es sencilla: cada aficionado deberá acudir al pabellón acompañado de un peluche nuevo, que lanzará a la pista en el momento indicado por megafonía. Un amplio equipo de voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Bizkaia se encargará de recogerlos, clasificarlos y distribuirlos entre las familias que más los necesitan.
La organización recalca la importancia de que los peluches sean completamente nuevos, como única manera de garantizar su buen estado y la seguridad de quienes los recibirán.
Puntos de recogida y una llamada a la solidaridad
Más allá del lanzamiento masivo, el encuentro contará también con puntos de recogida de otros juguetes nuevos para quienes deseen colaborar adicionalmente. Se recuerda que los juguetes deben ser no bélicos, no sexistas y preferiblemente educativos o promotores de valores positivos.
Con esta iniciativa, el club busca no solo reunir regalos para las familias con menos recursos, sino también fomentar entre los más pequeños el valor de la solidaridad y la importancia de compartir durante la Navidad.
Indicaciones clave para una recogida segura
- Los peluches deben ser nuevos; los usados podrán destinarse a otros proyectos, pero no entrarán en esta campaña.
- Solo podrán lanzarse a la pista cuando se anuncie claramente por megafonía.
- Los juguetes deben ser no sexistas, no bélicos y con mensajes positivos.
- Se pide evitar peluches con contenido violento, discriminatorio o que perpetúe estereotipos.
Con todo preparado, el Bilbao Arena espera repetir la imagen que ya se ha convertido en tradición: una pista completamente cubierta de peluches y un público entregado que demuestra, un año más, que el deporte también puede ser motor de solidaridad.