Luz verde a la tercera pieza del triángulo de actuaciones pendientes para la dinamización de Artxanda. El Ayuntamiento de Bilbao ha aprobado esta mañana la licitación para la reapertura del restaurante Antón. El objetivo es que esté en funcionamiento el próximo año de cara a contribuir a reactivar la hostelería en el entorno natural y complementar las actuaciones que se están llevando a cabo en el ámbito del ocio al aire libre.
El concejal de Planificación Urbana, Proyectos Estratégicos y Espacio Público, Asier Abaunza, ha informado de este paso tras la reunión semanal del gobierno municipal. Otro de los vértices de la apuesta del Consistorio por la zona es el Parque de Aventuras de Pike, ya adjudicado y que sigue avanzando con la aprobación también esta mañana del contrato de suministro de las casetas de vestuarios y almacenaje de material. Y el tercero es la rehabilitación de Nogaro, que será uno de los temas a tratar mañana en el Pleno Municipal.
La rueda sigue girando y Abaunza ha afirmado que el plan de relanzamiento de Artxanda como eje del ocio familiar “está acercándose a su ecuador”. El próximo año será clave. Es entonces cuando está prevista la apertura del Parque de Aventuras y el Ayuntamiento confía en que también recupere el pulso el restaurante Antón, que es la “puerta de entrada, justo frente a la estación del funicular”, de la zona.
Concesión
“Que esté cerrado no ayuda precisamente a fomentar esa imagen de espacio dinámico, atractivo, en el cual se pueden desarrollar este tipo de actividades”, ha asegurado el concejal bilbaino. A su juicio, la reapertura del Antón tendrá capacidad de tracción para “otras iniciativas privadas”. En esa línea, ha citado el Isidro, el Miramar y La Parrilla, protagonistas también de la época en la que Artxanda era un referente de la hostelería y que hoy están con la persiana bajada.
Bilbao aporta su pieza ya que el Antón, aunque está ubicado en Sondika, es de su propiedad. Al margen de los plazos marcados, lo más importante es el trabajo de fondo que hay detrás del proceso de licitación. El Ayuntamiento ha tenido ya “contactos con empresarios hosteleros interesados” y ha tenido en cuenta su opinión a la hora de lanzar la convocatoria. “Habrá concurrencia”, ha señalado Asier Abaunza. Leyendo entre líneas, las expectativas de reapertura del restaurante son muy elevadas.
Con la meta de que la actividad se reanude el próximo año, el proceso de licitación que ya está en marcha contempla cuatro meses para la redacción del proyecto y el visado municipal y un máximo de 12 meses para realizar las obras. Parte del trabajo está hecho, ya que el Consistorio ya ha acometido la reforma estructural del edificio principal y el derribo de las construcciones que se añadieron en los 70 y 80, cuyo estado no dejaba margen para otra solución.
La concesión del dominio público será por un plazo de 30 años, tiempo que garantiza la “amortización de la inversión”. El adjudicatario tendrá que asumir el coste de las obras de rehabilitación interna y la construcción de nuevos elementos. Además, asumirá una cuota mensual de 15.000 euros (más IVA), actualizados con el IPC anual.