Bizkaia se rinde al fuego purificador de San Juan

La noche de 23 de junio es especial en todos los rincones de Euskal Herria y de Europa. El solsticio de verano reúne a niños, adultos y ancianos en distintos puntos de Bizkaia, quemando los malos recuerdos y dando paso a nuevos tiempos y vivencias. Hay quien aprovecha para quemar, escritos en un papel, sus miedos y momentos tristes, y quien confía en las llamas para que sus deseos se cumplan. Quien olvida los exámenes y nervios del curso escolar dejando arder apuntes y libros, y quien salta sobre el fuego para atraer la buena suerte. La más corta del año, la noche de San Juan es la noche mágica por excelencia y, como todos los años, centenares de hogueras se encendieron ayer en Bizkaia en un rito purificador de un solsticio de verano que hunde sus raíces en los antiguos ritos paganos. 

Como en tantos rincones de Bizkaia, Bilboko Konpartsak celebra la noche de San Juan con actividades desde las cinco de la tarde en el Parque Etxebarria, culminando con el encendido de la hoguera en una noche siempre tan especial, más después de las cancelaciones por el tiempo en 2023 y 2024. Miles de personas se concentran para disfrutar del acto organizado por las comparsas de Bilbao, que ha incluido desde talleres para la elaboración de candelas, chocolatada y hasta una romería.

Sentados en grupos en el césped del parque, o en pequeños rondos cerca del escenario o de los puestos que ofrecían chocolate y algo de comida, los bilbainos y bilbainas disfrutaban del buen tiempo que ofrecía la tarde y la noche vizcaina. "Está siendo una tarde diferente. Me sorprende que haya personas de todas las edades", cuenta Nerea Martínez, que disfrutaba de la programación desde que ha llegado a las siete de la tarde con sus amigos.

Chocolatada, protagonista de la tarde

Durante buena parte de la tarde, las colas de personas esperando servirse del chocolate que ofrecían los comparseros ha sido parte del paisaje del Parque Etxebarria. "Hemos hecho veinte minutos de cola para poder tomar el chocolate, ha sido una tarea difícil y nos lo hemos acabado en menos de cinco", continuaba Nerea.

"Estamos expectantes porque el año pasado tuvimos que cancelarlo por el tiempo y el anterior también”, contaba Maitane López, de la comparsa Satorrak. "Estamos felices porque es un momento en el que vamos a revivir los San Juanes. Vamos a volver a juntarnos con Bilbao. Y también volver a juntarnos las comparsas”, añadía.

Voluntarios de Bilboko Konpartsak

"Creemos que está yendo muy bien. Todas las comparsas estamos participando de manera activa. Algunos de sus miembros participan de forma activa, por ejemplo haciendo algún turno de barra o de montaje del escenario. Si no te ha tocado turnocomo tal hoy, pues vienes a echar unos tragos y disfrutar con la gente y del ambiente", afirma la comparsera de Satorrak.

Tras la chocolatada y, los talleres y trikitilaris previos, llegaba el turno de prender el fuego que diese calor a Bilbao. Con un poco de retraso, las caras de los presentes se iluminaban tras el prendido de la hoguera de madera que preparó Bilboko Konpartsak. Pasadas de las diez de la noche, llegaba la hora de la romería que animaba y cerraba la noche tan especial.