La isla de Zorrotzaurre ataca su frente del Canal de Deusto ampliando aún más si cabe el área de ampliación de remodelación urbanística. La Junta de Concertación de la unidad de ejecución de la Actuación Integrada 2 (AI2) ha sacado a concurso las obras de urbanización de dos tercios aproximadamente de la franja de tierra de la ínsula que mira al canal, en concreto las más cercanas a las puntas norte y sur de Zorrotzaurre.
Según el pliego de cláusulas administrativas, la Junta de Concertación prevé un desembolso de casi once millones de euros, IVA excluido, para ejecutar estos trabajos que alumbrarán una nueva zona de esparcimiento y solaz para la ciudadanía de Bilbao a lo largo de cerca de dos kilómetros de corredor fluvial.
Esta Junta está compuesta aproximadamente en un 90% por las firmas constructoras Acciona y Altuna y Uria, las cuales fueron las responsables en una unión temporal de empresas de la generación mediante rellenos de dos tramos del canal de cerca de 52.000 metros cuadrados nuevos de superficie que implicaron el ensanchamiento de la isla de Zorrotzaurre. El resto de la junta la componen media docena de pequeños propietarios junto al Gobierno vasco, su sociedad de promoción de vivienda, Visesa, y el Ayuntamiento de Bilbao.
En conjunto, todos los miembros de la junta son los responsables de la urbanización tanto de los nuevos terrenos generados artificialmente como del resto de extensión natural de la isla que sumados ambos alcanzan casi 64.800 m2 de superficie en total para convertirlos en nuevos solares para zonas públicas y proyectos residenciales.
Según el pliego de condiciones, el contratista que gane el concurso contará con 24 meses para la creación de las campas, paseos, zonas para descansar, juegos infantiles y hasta un gran estanque en formato lámina de agua
En la financiación de los trabajos de urbanización va a tomar parte también la Junta de Concertación de la Unidad de Ejecución 1 de Zorro-tzaurre, la que lleva a cabo la misma labor en los dos extremos de la isla.
Actuación conjunta
Su director gerente, Juan Carlos Sinde, explica a DEIA que “una parte pequeña de la actuación nos corresponde ejecutar a nosotros pero para acometer toda la franja a la vez y ser más prácticos hemos llegado a un acuerdo con la junta de la AI2 para encomendarles a ella nuestra zona”. Se trata de cerca de 500 metros lineales del paseo por los que la Junta de Concertación que dirige Sinde aportara en números redondos dos millones de euros al proyecto conjunto.
El coste total de cerca de once millones de euros de la operación, en principio, no parece excesivo. La razón es que en toda la zona a urbanizar no se va a tender trama urbana alguna, es decir, ni calles, ni plazas cuya ejecución con todos los servicios esenciales que tienen que discurrir bajo la superficie es la parte más cara de este tipo de actuaciones urbanísticas.
En este caso se va a actuar además sobre una mayoría totalmente limpia al ser en su mayoría terrenos generados con rellenos que carecen de contaminación y que se dejaron preparados en la operación llevada a cabo entre 2019 y 2021.
La zona de trabajos se verá condicionada por el inicio en los próximos meses de varios bloques de viviendas previstos tanto en la punta norte como en la punta sur de la isla de manera que durante los dos años que se desarrolle la urbanización convivirán a la vez las obras a ras de calle con la excavación de los solares y el crecimiento de los edificios residenciales, un total de 700 viviendas en régimen de precio libre, pisos de VPO y de VPT.
Esta simultaneidad de tareas está reflejada en las condiciones del contrato que especifica también como el contratista deberá ejecutar los remates de la obra de urbanización cuando hayan concluido las sucesivos trabajos de edificación.
En concreto, Acciona y la firma vasca Altuna y Uria tienen los derechos edificatorios sobre seis parcelas residenciales, que suman 12 bloques de viviendas, y que se reparten en la zona ribereña de ambas puntas de la isla. La que antes ha dado a conocer los datos básicos de sus edificios de viviendas es la promotora Loiola, perteneciente al grupo Altuna y Uria. La firma quiere iniciar este mismo año los bloques previstos en tres parcelas que sumarán 150 viviviendas.
En concreto, el primer edificio con 42 viviendas de precio libre se levantará en la zona ribereña de la isla colindante al puente de Frank Gehry. El segundo contará con 45 pisos de precio tasado en un solar pegado al descrito y el tercero se ubicará en la punta norte, en una parcela próxima al otro puente de la isla, el de San Ignacio. En este terreno se levantará un bloque con otras 60 residencias a precio de mercado.
¿Quién es quién?
Comisión gestora
Es la que gestiona todo el proyecto urbanístico que acoge en su integridad la isla de Zorrotzaurre y la orilla derecha del Canal de Deusto. Se ha dividido en dos zonas de intervención diferenciadas.
Actuación Integrada 1
Es la más extensa al recoger toda la superficie del Plan urbanístico de Zorrotzaurre a excepción de la margen izquierda del Canal, la que va desde el puente de Gehry hasta la punta norte de la isla. Esta Actuación Integrada 1 se divide a su vez en dos Unidades de Ejecución cada una con su Junta de Concertación respectiva como brazo ejecutor.
Unidad de ejecución 1
Es la más avanzada y se encarga de los proyectos públicos que se están desarrollando en la margen derecha del canal, casi ya culminada, y las que se efectúan en los dos extremos de la isla.
Unidad de ejecución 2
Constituida recientemente, es la que está más en pañales y se va a encargar del desarrollo urbanístico del centro de la isla. Con su finalización se culminará todo el plan urbanístico en desarrollo.
Actuación Integrada 2
Es la responsable de la franja ribereña de la isla que mira al canal, parte de la cual se ha generado con los rellenos del canal efectuados entre 2019 y 2021. La urbanización de estos dos kilómetros lineales de parques se ejecutará en dos fases diferenciadas.
