Bilbao prueba ajustar la potencia de las farolas para ahorrar energía

Según los datos aportados por el área de Obras y Servicios, en la actualidad iluminan la noche botxera 48.157 puntos de luz de los cuales 11.715 de ellos son de tecnología led, es decir, un 24% sobre el total. Unas lámparas que permiten ahorrar en la factura municipal de la villa y cuya moderna tecnología está sirviendo además para probar nuevas fórmulas reductoras de energía.

Por ejemplo, ahora mismo se está desarrollando un proyecto piloto en el que se lleva a cabo una bajada de la potencia, y por ende la intensidad de los leds, en periodos de la noche en los que haya menor tráfico tanto de vehículos como de personas.

El alcalde, Juan Mari Aburto, refirió a este respecto el pasado miércoles en la presentación del Plan de Ahorro Energético en el que esta inmerso el Ayuntamiento que “el ahorro es importante y no afecta a la vida de los vecinos y vecinas ya que con un poco menos de luz no se sienten mal”.

Buena parte del nuevo parque lumínico viene de la mano del estreno de actuaciones urbanísticas. En los últimos años, “siempre que se ejecutan urbanizaciones ya sean de iniciativa municipal o desarrollos de ciudad privados, la tecnología que se instala en alumbrado público es led”, concretan desde el área municipal.

Todo ventajas

Fuentes municipales indican como “se instalan nuevos equipos por poseer un alto rendimiento lumínico, obteniendo con ello un aumento de su eficacia gracias a los leds y al desarrollo de nuevos reflectores”.

Todo este cambio además ya tiene una tradición. Se lleva una década sustituyendo esta fórmula de iluminación tras iniciarse en 2013 con los primeros leds, algo que sorprendió por sus ventajas. Las viejas lámparas existentes cuentan con menor rendimiento lumínico y más gasto económico mientras que la tecnología led es de escaso consumo y, encima, más barata. Ha sido en los últimos años cuando el área que dirige Kepa Odriozola ha realizado “un esfuerzo por mejorar la instalación de alumbrado”, concretaron.

Así, en 2020 se estrenaron 740 entre los 296 colocados en nuevas farolas y otros 444 sustituidos. Al año siguiente el total se duplicó con respecto al ejercicio precedente. Fueron 1.421 de los cuales 611 fueron nuevos y 810 sustituciones de antiguas bombillas. El pasado año se mantuvo el ímpetu con 1.305 nuevas luminarias entre las 887 instaladas ex profeso y 418 cambiadas.

Una prueba de ello son las obras finalizadas en los últimos meses como la mejora del alumbrado en el paseo de El Arenal donde se han instalado 77 leds, también en el Parque Eskurtze donde las intervención se ha practicado en 133 farolas, además de la reforma llevada a cabo entre los números de 138 y 187 de la avenida Lehendakari Agirre con casi otro centenar de puntos de led. Además, todas las áreas no se sacan de la oscuridad de forma homogénea. Desde el área de Obras y Servicios concretan que “se varía la potencia que se instala en función de la ubicación de cada punto de luz para dotar a cada zona de una iluminación óptima”.

Es este año cuando el área está dándole más energía a los cambios en las farolas. Con datos actualizados a la última semana de setiembre iluminan con luz blanca otras 1.644 luminarias, de las cuales 1.333 son sustituciones y las restantes 311 instaladas nuevas. Y todavía quedan tres meses de renovaciones.

Ahora mismo, se está actuando de manera masiva en el Casco Viejo que va a olvidar el viejo color entre anaranjado y amarillento de sus estrechas calles. Se van a instalar un total de 860 bombillas led algunas de las cuales también implicará el cambio del báculo o las farolas en caso de que su avanzada edad lo requiera.

La semana pasada se ha actuado en la plaza Ernesto Erkoreka y Sendeja entre otras calles que aún no habían sido renovados y en los alrededores, como son las zonas de Mallona, Zabalbide, Sendeja, Atxuri y Solokoetxe. Durante todo este mes de octubre se ocupará parte de la calzada y de la acera en las calles Ribera, Sorkunde, Zabalbide, Zumárraga, travesía de Mallona o la plazuela Encarnación

Pero no solo se cambian viejas bombillas por nuevos leds. Con la renovación de las luminarias se cambian también las líneas que las unen para ir implantando un sistema de Telegestión que “va a dotar a la red de alumbrado de puntos de luz inteligentes”.

Otra mejora es la incorporación de dispositivos de control en las luminarias, lo que se denominada telegestión, la cual permite al Consistorio contar con una gran cantidad de datos para ofrecer un mejor servicio y así “analizar los consumos de da en tiempo real a través de una plataforma software” y contar incluso con la posibilidad de realizar encendidos y apagadas en remoto cuando sea necesario.