Apenas ha transcurrido un mes desde que Rodríguez Arias ha podido deshacerse del polvo que atestaba la calle por el desarrollo de las obras que se han alargado varios meses, pero las consecuencias ya comienzan a percibirse. “Hay menos coches que antes y la gente pasea más”, explican desde Luz Bilbao, uno de los comercios que se beneficia de la renovada imagen urbana en el tramo que discurre entre Alameda Rekalde y la Plaza Campuzano. “Es una obra que amabiliza la ciudad y hay que darle continuidad”, ha declarado este miércoles el alcalde Juan Mari Aburto, quien ha transitado por las nuevas aceras de 4,5 metros. De hecho, esta intervención, que ha contado con un presupuesto de 2.081.323 euros, es la primera fase de un proyecto que contempla la transformación integral de Rodríguez Arias.

El objetivo que busca el Ayuntamiento de Bilbao es potenciar un corredor comercial entre Abando e Indautxu, complementario a la Gran Vía. Y para ello tienen muy claro cuáles son los siguientes pasos a dar. “Hemos intervenido también en las conexiones de las calles, tanto en Iparraguirre, Máximo Aguirre como en Doctor Achúcarro, pero ahora hay que intervenir en las perpendiculares en su conjunto”, ha anunciado el primer edil, quien ha señalado que su intención es hacer “una licitación anticipada” antes de que acabe el año, con un presupuesto de 2024. La idea sería poder empezar las obras de cara al próximo verano. “El proyecto ya está hecho y es una ventaja que ya tenemos”, ha apuntado sobre trazado que seguirá mejorando hacia la calle Telesforo Aranzadi.

Aburto ha reconocido que se han eliminado plazas de aparcamiento –unas 48 o 49– en los 6.000 metros cuadrados de superficie en los que se ha actuado. A cambio, se ha ganado espacio para los peatones, generando una zona “más amable” para el comercio, que “ha sufrido durante el desarrollo de las obras”. Asimismo, el alcalde ha destacado que la iluminación y el mobiliario urbano invitan a que haya zonas estanciales en las que se pueda detener y para charlar un rato. Además, ha subrayado que durante la obra en la que se ha levantado el vial, colocándolo a la misma cota que la acera, se ha sustituido el arbolado y se han ampliado los espacios verdes. 

Según ha especificado, esta fase de la obra ha contado con un presupuesto de 2.081.323 euros, de los cuales 619.835 euros proceden de la subvención europea Next Generation.

COMERCIANTES DE LA ZONA

Los comerciantes de la zona celebran el fin de la obra. “Han sido unos meses horribles, muy largos, con mucha suciedad, mucho ruido”, ha asegurado Mónica Zuazo, de la tienda de iluminación Luz Bilbao, donde confían que se abra una etapa con la semipeatonalización de la calle, en la que se espera más tránsito de viandantes. “Que sirva de algo, no solo para hacer bonito”, ha deseado esta comerciante. En la misma línea, José Ramón Senlle, administrador de la tienda de complementos Khala, ha afirmado que en los últimos meses las ventas han descendido considerablemente, una tendencia que ya ha comenzado a invertirse. De hecho, ha revelado que “hay locales vacíos que llevaban mucho tiempo sin alquilarse y se están llenando poco a poco”. Con ello, espera poder recuperar el tirón de este corredor comercial. “Tenemos otra tienda en Colón de Larreategui y en esa zona hay más vida y está creciendo más, esta se estaba quedando un poco antigua”, ha apuntado Senlle.

Sin embargo, hay comerciantes que exponen ciertos desacuerdos con decisiones relacionadas con la obra. “Han quitado un parking de motos, y un poco más adelante había otro. Es algo que no han sustituido”, ha manifestado Raquel Zorrilla, comerciante del negocio de reparación de calzados Morales Hermanos, donde son firmes defensores de este vehículo, con el que se desplazan habitualmente, ya que lo consideran una alternativa más económica y ecológica. “Contaminan más las fábricas de textiles”, ha añadido Zorrilla. El emplazamiento de los contenedores de basura tampoco ha gustado a Mónica Zuazo: “Nos hemos peleado, hasta más no poder, para que los contenedores no estuvieran delante de nuestra tienda. Después de haber levantado todo, lo suyo hubiera sido que hubieran soterrado los contenedores”.