La nueva trama urbana de la isla de Zorrotzaurre ya está completamente perfilada. La labor de urbanización que lleva a cabo la Junta de Concertación (JCZ) de la primera fase ya es visible a vista de dron o tomando altura desde los montes cercanos, como si el plano que dibuja las zonas comunes de la isla se hubiera trasladado a escala real sobre el terreno.

La delimitación de calles, el tendido subterráneo de conducciones diversas, la instalación de farolas, las paradas para Bilbobus, las amplias aceras con el baldosado de diferentes colores, zonas de estacionamiento para vehículos... todo ello ya está muy avanzado en el callejero de la punta norte de la isla, entre San Ignacio y Zorrotza. También lo está la primera calle que se va estrenar en Zorrotzaurre ubicada en el otro extremo de la antigua península, al lado del puente Frank O Ghery.

Juan Carlos Sinde, director de la Junta de Concertación y de la Comisión Gestora de Zorrotzaurre, concreta para DEIA que “entrará en servicio, seguro, a lo largo del próximo mes de junio, en un día aún por concretar”.

La nueva arteria para uso de peatones y vehículos mide sobre 400 metros de longitud y su apertura es obligada para dar un alternativa de paso al centro de la isla, una vez que la JCZ clausure la actual entrada y salida a la isla desde el puente de Frank Gehry hasta la orilla de la ría que conforma la calle Ribera de Deusto.

Buena parte de esta zona será ocupada en los próximos meses para acometer la construcción de un túnel bajo la ría por el que discurrirán todos los servicios esenciales necesarios para los nuevos vecinos de esta parte de Zorrotzaurre.

Desde el puente Gehry

El nuevo recorrido de la calle, al que tan solo le resta el asfaltado de la calzada, se inicia a unos 50 metros del mencionado puente que sobrevuela el canal, en el mismo punto donde también la contrata ha construido los primeros metros de la avenida Galleteras, la principal arteria que atravesará la isla de norte a sur.

La calle discurre por detrás de la conocida como La casa de la Palmera y llega a la altura de la antigua sede de Coromina Industrial, el viejo edificio de 1928 que permanece a la espera de su restauración mirando a la ría. Desde aquí, el trazado tuerce 90 grados para llegar a la Ribera de Deusto de forma que el tráfico pueda continuar en dirección derecha, hacia el resto de la isla, o hacia la izquierda, para uso de los vecinos que viven en las casas ribereñas en una vía que no tendrá salida y se quedará en un fondo de saco.

La calle que se abrirá en junio solo está a la espera de detalles y su asfaltado final. Borja Guerrero

Aunque estaba previsto inaugurar la calle para Semana Santa, algunos problemas técnicos han demorado la fecha hasta junio. “Se abrirá tal y como va a quedar la calle para el futuro a falta de la plantación de algunos árboles que no es posible en esta época”, detalla Sinde. Solo cambiará el tramo corto que desemboca en la orilla, el cual será peatonal una vez finalice la provisionalidad del obligado paso de tráfico rodado.

Mucho más desarrollado está el conglomerado de calles y cruces que compone la trama urbana de la punta norte. “Vamos según el calendario y todo estará concluido y listo para abrir a la ciudadanía en noviembre o diciembre próximo, incluido el puente de San Ignacio”, adelanta el responsable de la JCZ.

Un cronograma que tiene muy en cuenta la construcción que está llevando a cabo la promotora del Grupo Urbas, Jaureguizar, en la parcela RZ13. En este solar ya están muy avanzados los tres edificios que albergarán las 172 viviendas de VPO que compondrán la primera manzana residencial de nuevo cuño en la isla y que sobresalen en la extensión vacía pero ya urbanizada que recogen las fotografías superiores tomadas con un dron hace semana y media.

Las instantáneas aéreas permiten conocer cómo será la futura avenida Galleteras cuyo último tramo está perfilado con todo detalle.

Cuenta con amplias aceras, plazas de estacionamiento y una zona verde central por la que está previsto discurra en un futuro el tranvía. También se observan todas las calles que desembocan en la avenida central y que conectan a derecha e izquierda con las dos orillas de la isla. Ello permite ya delimitar los solares donde se ubican los viejos edificios industriales que están llamados a ser reformados para albergar nuevos usos de servicio. Ejemplo son los que permanecen en pie de empresa como Tarabusi o Consonni. Además, también se han perimetrado las parcelas que en próximos años serán conquistadas por diversos bloques residenciales poco a poco.

El siguiente edificio en crecer es el que también Jaureguizar promociona en la parcela RZ5,al lado de sus tres edificios levantados, donde se construirán 233 viviendas de precio tasado. Ahora mismo está en el proceso de cimentación y toda la parcela está acotada por el tradicional vallado de color naranja que marca una zona en obras.

Justo al otro de esta futura manzana residencial está también concluido el gran estribo sobre el que se apoyará el futuro puente que conecte la isla con el barrio de Zorrotza al otro lado de la ría. Este tramo viario cuenta también con jardín central porque está previsto que por ahí también circule el tranvía en un posible salto futuro de su recorrido hasta el mencionado barrio bilbaino.

Paseo ribereño

También está concluida la calle que delimita con la ría y la que desembocará en el parque que se habilitará en el extremo norte de la isla. Borja Guerrero

Por debajo de este estribo, que ya ha sido pintarrejeado por los grafiteros a pesar de estar prohibido el acceso, también está desarrollado el último tramo de Ribera de Deusto que se han conformado como una ancha travesía con amplias aceras a ambos lados de una calzada de un solo carril.

La zona peatonal que linda con la ría duplica casi en anchura a su gemela y acoge también pequeñas zonas verdes longitudinales que permitirán dar agradables paseos. En este paseo ribereño también están colocadas las farolas, la barandilla de seguridad idéntica a la del paseo del canal de Deusto, embaldosados de diferentes colores y los pasos de peatones.

Todo el trazado de nuevas calles de la zona norte de la isla no llegan hasta la punta final, ya que este espacio está previsto que se dedique a una zona de parque que no requerirá de este tipo de urbanización dura y que se desarrollará una vez se vayan colonizando las diferentes parcelas con rascacielos de vivienda colindantes a lo largo del próximo lustro.

Al detalle

Punta norte según se previó en el calendario

La urbanización de esta parte de la isla suma nueve tramos de calles que servirán a los primeros vecinos de la isla a partir del próximo mes de diciembre.

Punta sur Estreno de calle por obligación

La necesidad de ocupar el actual acceso viario a la isla para acometer las obras de un subfluvial obliga a la apertura de la nueva calle.

La cifra

400

La calle que se estrenará en junio mide 400 metros de longitud y tiene cierta forma curva que acaba en un giro de 90 grados que desemboca en Ribera de Deusto.