El espectacular disparo de este viernes ha llevado a Pirotecnia Valenciana a hacerse con el primer premio del concurso de fuegos artificiales de Aste Nagusia 2022. El espectáculo, repleto de candelas, volcanes y meteoros, con un final apoteósico, convenció al jurado por unanimidad.

Los miembros del jurado se han rendido al "ritmo, diseño, ocupación de espacio, originalidad de las piezas, efectos sonoros y variación de conjuntos" de la empresa de Llanera de Ranes, la última en participar en el certamen de este año.

José Manuel Crespo Vidal es el pirotécnico que actualmente lleva las riendas de un taller fundado en 1965 por su padre, Manuel Crespo Ortells.

Se trata de uno de los diseñadores más renombrados y aclamados del Estado y así lo demostró ayer viernes, enamorando no solo al jurado, que le ha otorgado el galardón por unanimidad, sino también a todos los bilbainos que siguieron el disparo que, aunque arrancó algo flojo, fue cogiendo fuerza y ritmo con los minutos. Con un gusto exquisito, el castillo combinó la fuerza y el atronador ataque que gusta en Bilbao con figuras y colores bellamente seleccionados, alternando diferentes ritmos en 20 minutos que no dejaron tiempo al descanso y que finalizaron con un traca como pocas se recuerdan en Aste Nagusia que incluyó hasta un antológica mascletá final, el remate perfecto.

Crespo Vidal, considerado por los expertos como un 'mago de la pirotecnia', acumula varios galardones en los prestigiosos concursos de Blanes y San Fermín, y fue el pasado marzo el encargado del castillo especial de la Nit del Foc en las Fallas valencianas